Los 'Populares', todo un honor

La fiesta de los Populares ha vuelto a celebrarse seis años después en el mismo escenario, el teatro auditorio Buero Vallejo y lo ha hecho con la alegría de ver abarrotada de público la sala, con capacidad para un millar de personas. Por ello sea lo primero el agradecimiento a todos los que estuvieron y las disculpas a los que les hubiese gustado acudir y por cuestión de aforo no han podido acompañarnos en esta ocasión. Después vaya nuestra felicitación a todos los premiados, auténticos protagonistas de la velada en la que también tomó especial relevancia el monologuista Leo Harlem que levantó no solo sonrisas sino las carcajadas de los asistentes, mostrándose posteriormente cercano y amable con cuantos tuvimos la suerte de saludarle.

Igualmente destacar el honor de contar con un público llegado desde numerosas zonas de la provincia y muy representativo de la vida cultural, asociativa y deportiva de nuestra pequeña geografía. Todo un lujo contar con ellos y con las personalidades que aceptaron nuestra invitación. Tenemos que citar de manera especial al presidente del Gobierno regional, Emiliano García Page, al alcalde de Guadalajara, Antonio Román y al presidente de la Diputación, José Manuel Latre, pero es que no acabó aquí la representación de estas administraciones. De la Junta de Comunidades estuvieron también el portavoz del Ejecutivo, Nacho Hernando, las consejeras, Elena de la Cruz y Reyes Estévez y la totalidad de directores provinciales, así como el delegado, Alberto Rojo. Y de la Institución Provincial, casi todos los diputados, como también Equipo de Gobierno y grupos de la oposición, prácticamente al pleno, del consistorio capitalino.

Tampoco faltaron todos los parlamentarios nacionales, muchos diputados regionales y autoridades militares y eclesiásticas destacadas, sin olvidar al rector de la Universidad, Fernando Galván, el vicerrector en Guadalajara, Carmelo García y gente de la cultura como García Marquina, Suárez de Puga, Juan Garrido, Jesús Campoamor, Herrera Casado o los hermanos Fernández Galiano, Antonio y Emilio, y otros muchos más que no podemos citar por falta de espacio. No olvidamos, por otra parte, la representación del mundo empresarial y financiero también enorme. Lo dicho, todo un honor y privilegio ante el que únicamente cabe decir mil veces gracias. .