Mejorar los caminos rurales

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Editorial
Si durante este año las carreteras se han convertido en uno de los proyectos estrella de la Diputación provincial, no menos entidad tiene el arreglo de los caminos que la Institución está llevando a cabo a lo largo y ancho de la provincia. De hecho, el convenio de arreglo de caminos rurales suscrito entre la Diputación y la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural para los años 2008 y 2009 se encuentra, en la actualidad, ejecutado en un 95%, y ha llegado ya a un total de 264 municipios de los 279 que lo solicitaron.
Eso significa que casi la totalidad de los pueblos de Guadalajara han visto, o va a ver en breve, cómo cambia la fisonomía de sus caminos rurales. Se actuará sobre más de 2.000 kilómetros de caminos, con una inversión de cuatro millones euros –aportados al 50% por cada administración–, a los que se añaden otros 380.000 euros procedentes de los ayuntamientos. Si importante es el arreglo de las carreteras en una provincia como la nuestra, no menos lo es el de los caminos rurales. De ahí, la trascendencia de unas actuaciones de estas características. No se puede obviar que este tipo de actuaciones benefician a la colectividad de los usuarios, y sobre todo de los agricultores, que cada día se desplazan a través de esos caminos hasta sus explotaciones. Pero si a la mejora de estos viales le sumamos la importante transformación que está sufriendo el mapa de carreteras provinciales podríamos decir que se cierra el círculo, mejorando las vías de comunicación en todos su aspectos. De hecho, el Plan de Carreteras ha adquirido velocidad de crucero y a fecha de hoy, se encuentran ya aprobados 18 proyectos, prácticamente la mitad de los 39 previstos para las dos primeras anualidades, que se van a concentrar en 2008 para agilizar su ejecución. En número de kilómetros e inversión, la proporción es aún mayor y se acerca a los dos tercios: 173 kilómetros sobre un total de 264 y una inversión de 16 millones de euros sobre los 24,7 presupuestados. Sin duda Guadalajara está cambiando.