Mujeres engañadas

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Cartas al Director
LUCÍA RIVERA Barcelona
Según encuestas tales como la General Social Survey y el Eurobarómetro, las tasas de felicidad femenina en el occidente desarrollado han disminuido en los últimos 35 años, a pesar de que se haya ganado la batalla por la igualdad de oportunidades, el acceso a una profesión remunerada, a la anticoncepción y al aborto, y el divorcio sea cada vez más asequible.
Estos hechos, enarbolados como logros históricos por un feminismo que incitaba a las mujeres a la búsqueda a ultranza de una vida fácil y feliz, a costa de romper compromisos o renunciar a la fe religiosa, se han vuelto contra ellas al facilitar la disgregación de la vida familiar. La socióloga Lisa Graham McMinn afirma: este enfoque individualista no nos hizo felices, sino que nos dejó más solas . Pues el individualismo sólo redime cuando el deseo de realización personal va unido a la idea hacer algo bueno por los demás. De manera que yo me ocupo de mí misma, me formo y persigo mis objetivos no en primer lugar para ser más feliz, sino porque pertenezco a un mundo que necesita que dé lo mejor de mí misma. Y cuando contribuyo al bien de los demás, entonces encuentro la felicidad.