Nacho Abascal expone la mirada más cotidiana de Cuba en el bar Ivonne

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: MAR GATO. MADRID
Ivonne vuelve a contar entre las mesas de su establecimiento con la obra artística de uno de los reconocidos fotógrafos de Guadalajara, Nacho Abascal, quien presenta en la que se ha convertido en una sala alternativa de arte de referencia en Guadalajara una colección de fotografías en blanco y negro que tiene por objeto mostrar el la vida cotidiana de los habitantes de Cuba. Visualizarlas será como entrar en un nuevo mundo, aquel que nos permitirá viajar y conocer nuevas culturas sin ni tan siquiera movernos de una silla.
La sala alternativa de exposiciones en la que se ha convertido el bar Ivonne en la capital vuelve a tener nuevo inquilino. Como sucediera con su predecesor, Alfonso Romo, su firma será reconocida por muchos. Se trata del fotógrafo Nacho Abascal, quien ha optado en su apuesta por acercar la cultura fotográfica a los espectadores casuales de esta garito de moda con una colección antigua realizada diez años atrás pero que guarda aún una gran actualidad.
Bajo el título de Cuba, un día cualquiera, la muestra, compuesta por 12 fotografías en blanco y negro con tratamiento analógico, desvela a través de los retratos de personas anónimas e incluso conocidas, como el ya desaparecido Compai Segundo, los paisajes urbanos o la nocturnidad de La Habana la cotidaniedad de sus habitantes, aparentemente “felices”, tal y como percibió en su día Abascal durante su viaje hace ya 10 años, pese a los problemas de pobreza que parecen asediarles. Su optimismo ante la vida quizá juegue un importante papel en ello. Sin embargo, y yendo más allá de puras observaciones vitales, su colección de fotografías intenta por encima de todo enganchar al cliente en la observación de las instantáneas mientras pasa el rato tomando una copita o un café. Intenta ser así una ventana abierta a un nuevo mundo y una nueva cultura donde tienen cabida, por ejemplo, la cautivadora y fugaz mirada de un niño.

Apuesta por la cultura
Con esta colección fotográfica Nacho Abascal pasa a engrosar el historial de una joven y alternativa sala de arte que comienza a barajarse como un referente cultural en la ciudad, no sólo para los espectadores pasivos, que suelen diferir sobremanera del perfil de los visitantes de las salas al uso, sino también para los propios artistas, que ven en ella una gran posibilidad de exponer su obra sea del tipo que sea su carácter artistico.