Ni el fútbol logrará imponerse

16/08/2011 - 17:50 JD MEZ

En los últimos meses la economía se ha vuelto omnipresente. Convivimos con los sobresaltos de la prima de riesgo con una inquietante familiaridad. Somos conscientes de nuestra fragilidad.

Nadie recuerda que no hace demasiado tiempo el Gobierno se pavoneaba con que éramos una de las diez economías más importantes del mundo. La prodigalidad de antaño, con los ministros repartiendo ayudas y subvenciones por todo el mundo, ha quedado relegada a la cruda realidad. Ahora se habla de economía en los bares, las playas y las cenas de amigos como hace un tiempo se hacía con el fútbol. Todos tenemos una opinión. Cualquier aficionado al fútbol cuenta con un entrenador en su interior, pero ahora disponemos de un ministro de Economía en nuestra cabeza para ofrecer las recetas milagrosas que resolverán el problema. La situación nos angustia, porque esta crisis afecta a todos. Queda demasiado tiempo hasta las elecciones y tenemos una ministra de Economía cuyos único méritos son hablar inglés y ser la protegida de Rubalcaba y Serrano. Es como para ponerse a temblar. En está ocasión debemos esperar a que empiece la temporada de fútbol, aunque con el tamaño de la crisis y elecciones a la vista ni el fútbol logrará imponerse, aunque si logra tirar adelante la huelga.