No llegan las máquinas
14/11/2011 - 00:00
Las máquinas no llegan. Molina sueña con un Parador que, con su primera piedra ya colocada, sigue siendo un proyecto en el aire. Al menos así se siente en el Señorío donde del escepticismo se está pasando a la indignación. El mejor ejemplo es la iniciativa que ha iniciado la plataforma La Otra Guadalajara repartiendo 4.000 dípticos en los que critica los continuos retrasos de las obras y se escenifica el problema con un parto de seis años en el que la madre, la Ciudad del Señorío, no logra dar a luz al proyecto. No es la primera vez que se utiliza a los molineses como gancho electoral, ni es la primera vez que pasadas las elecciones no se vuelve a saber nada de lo prometido. A todos se nos viene a la memoria la promesa realizada por el mismísimo Zapatero en un mitin electoral en la campaña de 2008 de convertir la N-211 en autovía (entre las localidades de Alcolea del Pinar y Monreal del Campo) y de la que poco más hemos sabido a lo largo de estos últimos años. En Molina no quieren que con el Parador pase lo mismo. Por eso, después de que en septiembre se pusiera la primera piedra, y debido a que aún no han empezado de forma efectiva las obras, se plantean iniciar acciones para denunciar la paralización del proyecto. Hay que recordar que fue el propio presidente de Castilla-La Mancha, por entonces, José María Barreda el que anunció el compromiso de llevar a cabo esta importante infraestructura en abril de 2006. Tras numerosas vicisitudes, el 17 de diciembre de 2009 se firmó el contrato con la UTE Euroestudios, SA y Andrés Perea Ortega, ganadora del Concurso, para la elaboración de los proyectos básico y de ejecución, así como dirección de las obras del Parador. Sin embargo, desde entonces esta iniciativa ha avanzado poco en el plano efectivo. Los políticos siempre han querido sacar rendimiento de lo que se puede convertir en un revulsivo para la comarca, pero el hecho de que las máquinas no hayan llegado dan fe de la manipulación social que se ha buscado siempre con esta promesa.