Pequeña esperanza empresarial

27/09/2012 - 19:02 Redacción

Desde que en el pasado mes de julio se extendiera como la pólvora la noticia de que Inditex apostaba por Cabanillas para la construcción de una plataforma logística que supondría la creación de 500 nuevos empleos, las buenas noticias empresariales se han sucedido. Un mes después era la compañía de telecomunicaciones, Jazzte, la que a finales de agosto mostraba su intención de instalarse en la capital y crear 200 puestos de trabajo. Puesto punto y final al verano, el otoño no parece acabar con esta buena racha. Esta misma semana la apertura de un establecimiento de comida rápida en la ciudad y de la instalación de una empresa australiana en Alovera suponía la creación de más de medio centenar de nuevos empleos. En un momento en el que la economía no da un respiro en materia de empleo y en el que en el último mes nuestra provincia sumaba 423 personas más en sus listas de desempleados, resulta más que anecdótica la concatenación de aperturas y llegada de grandes empresas a nuestro territorio. Sin duda, en un momento en el que la coyuntura económica apunta a repuntes del desempleo, Guadalajara podría desmarcarse convirtiéndose en una de las pocas provincias españolas, que gracias a la llegada de estas grandes firmas, acabe remontando con ventaja las estadísticas. A pesar de ello, no podemos olvidar a otros muchos negocios de los de toda la vida que se van quedando en el camino de esta cruel crisis económica. Antiguos establecimientos, como el Belvedere, el Casinillo, El Tren o Puerta Gayola han cerrado sus puertas en los últimos tiempos a pesar de situarse en pleno corazón del casco histórico. Nos tendremos que aferrar a esa pequeña esperanza que supone el desembarco de nuevas empresas en la provincia para creer en las posibilidades de desarrollo de las que siempre ha hecho gala el Corredor del Henares.  Por eso, y sabiendo que la situación no es fácil, estos síntomas vienen a generar cierto optimismo en medio de una desazón generalizada.