Presupuestos ajustados
24/05/2012 - 17:38
Hace ya una semana que la presidenta castellano-manchega presentaba los presupuestos regionales que ascenderán a 8.290 millones y éstos siguen dando mucho que hablar. A grandes rasgos se podrían resumir en tres cifras claves: un techo de gasto de 5.648 millones de euros; unos gastos finalistas que ascienden a 1.311 millones y unas inversiones a las que se destinarán 220 millones de euros. Como destacaba Mª Dolores de Cospedal, estas cuentas suponen una reducción del 3,7 por ciento respecto al anterior presupuesto aunque eso no es un impedimento para que el 85,40 por ciento del gasto social sobre el techo de gasto vaya destinado a Educación, Sanidad y Asuntos Sociales. Sin embargo, y como suele pasar, el PSOE no está de cuerdo con estos cálculos. De ahí, que ayer anunciase la presentación de una enmienda a la totalidad. Los socialistas consideran que la reducción real del Presupuesto es del 18 por ciento y que podría esconder más recortes todavía para este año. Las versiones contrapuestas son comprensibles, aunque no lo parece tanto la necesidad de retrasar la tramitación parlamentaria. Así las cosas, y teniendo en cuenta que por mucha enmienda que se presente, el PP está dispuesto a aprobar estas cuentas, lo cierto es que Guadalajara no será una de las provincias más afortunadas. De hecho, según se recoge en el documento, la inversión que llegará a lo largo de 2012 será de poco más de 15 millones de euros. Una cantidad alejada de los 215 millones presupuestados en el anexo de inversiones en 2011. Claro que en un presupuesto con, tan solo, 220 millones de inversión para todo el territorio regional, poco más se podría esperar. Apenas se incluyen obras nuevas, salvo el arreglo y conservación de carreteras. Sí destaca el proyecto y ejecución del nuevo vaso de vertido en la planta de tratamiento de residuos de Torija, al que se han destinado dos millones de euros o el sellado del vertedero de El Casar con 1,1 millones. Poco más que sea reseñable a parte de unos pocos miles de euros para el Campus o para la reforma de centros escolares. Unos presupuestos austeros y reales según los populares; graves e irresponsables según el PSOE; pero sobre todo ajustados al máximo.