Reconocimiento a la Guardia Civil

20/03/2012 - 00:00 redacción


La visita del delegado de Gobierno de Castilla-La Mancha, Jesús Labrador, acompañado del subdelegado de Gobierno, Juan Pablo Sánchez-Sánchez Seco y la presidenta de la Diputación, Ana Guarinos, a los cuarteles de la Guardia Civil de Sigüenza, Maranchón y Molina de Aragón, en la jornada del lunes, festividad de San José, se ha convertido en un reconocimiento al servicio que prestan los agentes de la Benemérita en las pequeñas localidades, y que en los lugares donde no existe Policía Local, adquiere especial relevancia. En la provincia de Guadalajara, especialmente en las visitadas zonas de Molina de Aragón y Sigüenza, con numerosos núcleos de población dispersos y prácticamente deshabitados durante los fríos inviernos, la labor de la Guardia Civil es de vital importancia no solo en lo que a la seguridad contra la delincuencia se refiere o en materia de tráfico donde resuelven numerosas incidencias, sino como servicio de carácter humanitario. Cumplen los agentes esa función un tanto bucólica que desde antaño ha ofrecido esa imagen cercana y amigable de la pareja de la Guardia Civil. El trabajo permanente y abnegado de los agentes, al margen de los éxitos en operaciones o dispositivos contra la delincuencia, fue este lunes reconocido en una visita institucional que sirvió también para que las administraciones conozcan las necesidades de las diferentes dependencias y de sus efectivos. El motivo de la visita a Sigüenza fue entregar un coche de la DGT para facilitar los controles de alcoholemia que habitualmente hacen por las carreteras de la provincia los agentes de la Benemérita y que tienen o deben tener como finalidad no la de recaudar con las multas o detener a las personas para quitarles puntos del carne, sino prevenir una conducta delictiva que pone en riesgo la vida de los usuarios de las vías públicas. Cualquier inversión en la seguridad de las personas merece ser bien recibida como lo es este nuevo vehículo.