Sobre la accesibilidad de la Estación de Cercanías
05/03/2012 - 00:00
Esta carta la escribo en respuesta a la noticia recogida el día 29 de febrero en su periódico: Usuarios del CAMF critican la falta de accesibilidad de la estación de Cercanías.
Soy una persona discriminada porque mi manera de desplazarme exige que utilice una silla de ruedas. A partir de aquí ya está todo dicho: no puedo entrar a casi ningún sitio.
Soy una persona con la misma dignidad y derechos (y deberes) que las personas sin diversidad funcional pero no puedo ejercer la ciudadanía como el resto porque constantemente el entorno dice: tu no, los políticos que no cumplen con la legislación dicen: tú no y las personas que se empeñan en hablar en nuestro nombre dicen : tú no, que ya estoy yo aquí.
Tengo que aclarar los siguientes puntos:
1. Fui a la estación Renfe Cercanías de Guadalajara como persona particular, no como usuaria del CAMF (que esta es una circunstancia particular mía) y fui exigir el derecho a utilizar el transporte público como el resto de los ciudadanos Nos avala la Convención de la ONU sobre los Derechos de las personas con discapacidad (en vigor en España desde el año 2008) la Ley de Accesibilidad de Castilla La Mancha (Ley 1/1994, de 24 de mayo) la LIONDAU (Ley de Igualdad de Oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de 2 de diciembre de 2003), la Constitución (1978)
2. Lo que en otros colectivos es un claro caso de discriminación como por ejemplo imaginemos que a las mujeres por ser mujeres no les permitieran utilizar el tren, esto sería un caso claro de discriminación y los medios de comunicación, el aparato judicial etc se pondrían en marcha enseguida para subsanar ese atentado a los derechos humanos Sin embargo en las personas con diversidad funcional (discapacidad), no poder utilizar un tren, no se considera un caso de discriminación sino, simplemente de un problema de accesibilidad.
3. No necesito ni necesitamos que hablen por nosotros aunque sí agradecemos el apoyo solidario del resto de la ciudadanía porque todos somos frágiles y cualquier intervención en materia de accesibilidad es una inversión en futuro para la sociedad. Me ofendió que Jesús García, de la sección sindical de Cocemfe al que no se le invitó a asistir en nombre de ninguna sigla (ni COCEMFE ni CNT) se erigiera, por su cuenta en nuestro representante o portavoz , ejerciendo de esta manera el minusvalidismo paternal del que estamos hartos y que tanto daño hace a las personas con diversidad funcional. Apresados nos tiene a nivel social.
4. Nada sobre nosotras/os sin nosotras/os.
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