Un respiro relativo

09/07/2011 - 00:00 Redacción

Los precios bajan aunque con eso no parece que nuestros bolsillos se alivien. Según las estadísticas, hechas públicas ayer, el mes de junio ha vuelto a ser benevolente y de nuevo se registra un descenso del IPC. En nuestra región los precios bajaron dos décimas con respecto al mes anterior, es decir, una más que a nivel nacional. Sin embargo, Guadalajara se mantuvo en la línea general y con una décima de descenso fue la provincia castellano-manchega donde menos se notaron las bajadas de precio, con lo que acumulaba una tasa interanual del 3,2 por ciento. El incremento del crudo elevó los precios desde principios de año, con una subida del 3,3% en enero, del 3,6% en febrero y marzo, y del 3,8% en abril, el valor más elevado desde septiembre de 2008, mes en el que se situó en el 4,5%. En mayo, el IPC rompió esta tendencia al mantenerse estable en tasa intermensual y bajar en tasa interanual. Esta bajada, junto a la evolución del IPC de las bebidas alcohólicas y el tabaco pueden haber sido la clave de la contención. Es cierto que el descenso de los precios en España muestra una buena evolución en los dos últimos meses habiéndose reducido la inflación desde el 3,8% que alcanzó en abril hasta el 3,2% de este último mes. Sin embargo, a pesar de estos dos meses consecutivos de sorpresas positivas en lo que es la inflación, los expertos consideran que sigue siendo mucha para tan poco crecimiento. Además esta mejora puede ser pasajera pues con la llegada del mes de julio, se han hecho efectivas subidas del precio en el gas natural, el butano y la luz. El gas natural y el butano, los carburantes más usados en los hogares españoles, van a subir en media un  5,7%, mientras que la tarifa de la luz subirá una media un 1,3% que no es mucho pero que se une a la subida histórica del pasado mes de enero, del 9,8%. Así pues, poco va durar la alegría para las economías domésticas que disfrutan de un respiro relativo.