Uno de cada ocho neoyorquinos tiene estrés por el 11-S

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: EUROPA PRESS
El ataque terrorista contra las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001 causó graves traumas psicológicos a miles de neoyorquinos, pero en especial a los residentes en el sur de Manhattan, donde se erigía el World Trade Center. Tanto es así, que tres años después de la tragedia uno de cada ocho ciudadanos de este distrito seguía presentando estrés postraumático.
Así lo ha revelado un estudio del New York City Health Departament que, pro primera vez, ha seguido los efectos a largo plazo de la salud mental de los ciudadanos más cercanos a la denominada zona cero.
Los residentes en el sur de Manhattan, en las inmediaciones de la actual zona cero, presentaban pasados tres años del 11-S niveles de estrés postraumático tres veces superior a la media del resto de neoyorquinos que vivieron el atentado. Así lo ha revelado un estudio publicado esta semana en la Journal of Traumatic Stress.
De esta forma, un 12,6 por ciento de los residentes en la zona seguían presentando secuelas psíquicas pasados tres años del atentado, una tasa algo superior a la que presentaban tanto efectivos de rescate como trabajadores de las Torres Gemelas, que se situó en el 12,4 por ciento.
Para llegar a estos datos, se analizó la salud mental de 11.000 residentes en el entorno de la zona cero en el primer estudio que refleja los efectos a largo plazo del mayor ataque sufrido en Estados Unidos. Según una información del New York City Health Departament, recogida por otr/press, entre las personas que presentaron estrés postraumático la gran mayoría vivió la tragedia de cerca al ser superviviente de ella o haber perdido a un ser querido de forma que presentaban síntomas como hipervigilancia, insomnio o reacciones emocionales al recordar el 11-S.
No obstante, los síntomas no se presentaron de la misma forma en todas las víctimas, de forma que los responsables del estudio pudieron comprobar cómo las personas divorciadas presentaban una tasa de estrés postraumático del doble que los casados (21,5 por ciento frente a 9,5 por ciento), quizá porque sentían menos apoyo emocional. Asimismo, las mujeres se vieron afectadas en mayor medida que los hombres (un 15 por ciento frente a un diez por ciento), algo que ya se ha visto plasmado en otras tragedias. En este sentido, resulta también llamativo cómo los ciudadanos de raza negra y los hispanos presentaron más secuelas psíquicas que el resto (incluso más del doble) porque, según los científicos del estudio, los bajos niveles de educación incrementan los riesgos de sufrir estos trastornos.