Unos duros presupuestos

Los votos de la mayoría del Partido Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha tumbaban el martes la enmienda a la totalidad presentada por el PSOE a los primeros presupuestos del Gobierno de María Dolores Cospedal. Lo cierto es que el debate no dio para muchas novedades, más aún si tenemos en cuenta que el PSOE volvió a recurrir a los argumentos del recorte en Educación y Sanidad mientras que los populares se defendían de las críticas retomando el recurso de la herencia adquirida. Esta mañana era el turno de los debates provinciales sobre el mismo asunto, que tampoco se salieron del guión. Por un lado la diputada regional del PP, Mª José Agudo, defendía el proyecto presentado por el Gobierno asegurando que  “Es la primera vez que un presupuesto va a decir la verdad. Va a recoger los ingresos reales y los gastos ciertos”, aludiendo a los desfases de ejercicios pasados en los que gobernaban los socialistas, mientras que el diputado socialista, Luis Santiago Tierraseca, criticó que las cuentas regionales “apenas” reserven 15 millones de inversión para la provincia de Guadalajara. Argumentos poco novedosos y escuchados por activa y por pasiva desde que el 4 de junio el PSOE anunció la enmienda a la totalidad. Ahora continúa el trámite parlamentario con el objetivo de que los Presupuestos regionales se puedan aprobar lo antes posible. La austeridad y el ajuste parecen inevitables aunque no por ello agradables; aunque más allá de las cifras macroeconómicas de estas cuenta lo que se intuye es un cambio de tendencia. El nuevo Gobierno no está por la labor de aprobar algo que no pueda cumplir y de ahí el difícil papel del consejero de Hacienda, Arturo Romaní que se ha visto obligado a cuadrar los presupuestos más duros de la última década.