Aike aboga por la gestión directa de la Biblioteca municipal Suárez de Puga
Como garantía de continuidad ante la finalización, el 30 de junio, del actual contrato de gestión.
A finales de junio finaliza el contrato de la gestión de la única biblioteca municipal con la que cuenta la ciudad, la Suárez de Puga. Ante la incertidumbre generada sobre lo que va a pasar a partir de esta fecha y para garantizar su continuidad, Aike plantea un cambio en el modelo de gestión, municipalizando los servicios bibliotecarios, equiparándolos al resto de municipios de la región y afrontando las deficiencias actuales. En este sentido irá una de las mociones que llevará al próximo pleno municipal. Así lo han explicado Susana Martínez, portavoz de AIKE en el Ayuntamiento de Guadalajara y Javier López Roberts, presidente del partido, en rueda de prensa.
La moción de Aike pide una mejora en los servicios bibliotecarios, abogando por una gestión directa, que garantizaría la continuidad del servicio, sin cierres entre un contrato y otro. Una propuesta que ya se recogía en el programa electoral con el que el partido municipalista se presentó a las elecciones, “desde Aike apostamos por la municipalización de este servicio, la externalización es una anomalía más si nos comparamos con el resto de municipios de la región y no siempre, como está ocurriendo en estos momentos, se garantiza la apertura y continuidad” añade Javier López-Roberts. El presidente de la formación ha recordado que la fórmula es posible, el ejemplo es que se acaba de hacer con el servicio de recaudación de multas, que desde hace unos meses se realiza por personal del Ayuntamiento.
Desde Aike inciden en las limitaciones y precariedad de los servicios bibliotecarios municipales, una competencia que marca la Ley de Bases de Régimen Local, la Ley de Bibliotecas de Castilla-La Mancha y que el Ayuntamiento de Guadalajara no acaba de asumir, dedicando escasos recursos e incumpliendo los indicadores mínimos que marca la normativa, indican. Susana Martínez ha señalado que la Súarez de Puga nació pequeña y, en estos seis años de vida, sigue si cumplir los requisitos mínimos que marca la normativa para el tamaño y la población de Guadalajara. No se ha avanzado en la dotación del fondo, que apenas supera los 7.000 ejemplares, con el agravante de que en el último año no se han realizado nuevas adquisiciones, “VOX en otros municipios se ha dedicado a censurar títulos y materiales, aquí han ido más allá y directamente no han comprado nada, cero adquisiciones”, asegura.
Recuerdan también que esta biblioteca, inaugurada en el año 2018, sigue siendo la única de competencia municipal, ya que el anunciado proyecto para convertir la antigua nave de forja del Fuerte en biblioteca, con el proyecto redactado y la licencia concedida, ha quedado paralizado. Y denuncian que el concejal de cultura, Javier Toquero, no ha explicado cómo se va a gestionar la biblioteca a partir de esa fecha, ni qué pasos está dando el Ayuntamiento para resolver cuestiones que están estancadas desde hace tiempo y que impiden que los vecinos y vecinas de Guadalajara tengan servicios bibliotecarios acordes al tamaño y población de la ciudad en la que viven.