Carta de un niño confinado
Soy un niño, pero mi abuela dice que esto lo estudiaremos el día de mañana en los libros de historia y yo como lo he vivido en primera persona tendré un 10 o eso espero.
Ni siquiera sabéis quién soy, pero yo sí sé quiénes sois cada uno de vosotros. Sois unos valientes que estáis luchando por algo que nada ni nadie nos sabe explicar. Estábamos esperando que llegara la primavera y, sin embargo, nos llegó algo totalmente diferente. Algo que llaman coronavirus y que todavía no entiendo muy bien qué es, aunque mi madre me lo explica cada día.
Cada día salgo con mi madre, mi hermano y mis abuelos a aplaudir a todos esos sanitarios y esa gente de los supermercados y de limpieza que ayudan a que todo esto sea más fácil para todos. Pero realmente mi aplauso es para cada uno de vosotros por vuestro empeño, vuestro esfuerzo por vivir y porque estoy seguro de que vais a salir de ésta. Ahí fuera tenéis mucha gente que os está esperando. Que os recuerda cada segundo de su tiempo y que tiene miles de abrazos guardados y millones de besos para cuando salgáis. No os olvidéis nunca de esta primavera porque os va a marcar el trayecto de vuestra vida y os va a hacer más fuertes y mucho más valientes. No olvidéis tampoco decir a todo el mundo lo mucho que les queréis, que seguro que ahora os estáis dando cuenta de que antes lo decíais poco.
Soy un niño, pero mi abuela dice que esto lo estudiaremos el día de mañana en los libros de historia y yo como lo he vivido en primera persona tendré un 10 o eso espero.
Lo que quiero es desearos que os pongáis buenos, que pronto salgáis del hospital y podáis ver a vuestros amigos, familia y vuestra gente de toda la vida. Aquellos que antes eran sólo vecinos y ahora se preocupan por vosotros y les preguntan a vuestros hijos, padres, mujeres, maridos… Un beso enorme y espero que algún día nos encontremos por el camino.