Empresario: una raza a extinguir
30/09/2011 - 00:00
Intuición riesgo, arriesgas tu vida personal, sin límites de horas, ni de días, tu patrimonio sobre todo si tu empresa lleva tu apellido arriesgamos hasta nuestras vidas. Os pongo mi ejemplo para que os sirva. Primero, entro en una fase de ansiedad enfermedad traicionera donde las haya; segundo, el doctor me aconseja que deje unos meses o que elija morir o el negocio ya que estaba al límite; tercero, elijo, como es normal, salvar mi vida ¿quién haría lo contrario? Dudo entre cerrar o seguir, entre seguir o no, no sabes qué hacer y sino que levante la mano aquel que lo sepa. Bueno a los dos meses voy a la consulta, me dice que poco a poco baje pero que con mucho cuidado.
Era ya tarde: verano del 2008 casi final de año se me había hundido la empresa; me la habían aniquilado. Me engañan como a un bebe ya que sabían que estaba empastillado hasta las cejas. Empecé a meter dinero y más dinero en total 1.400.000 euros. Me entrampé hasta arriba porque según el contable el desfase se debía a una nueva apertura cuando esa tienda estaba pagada a pulmón abierto.
Yo con mi ansiedad y con 14 pastillas diarias era un alucinógeno en el mundo sin rumbo y así pasó. El resto ya lo sabéis desgracia. No dejéis vuestro negocio en manos de nadie, nunca, y por supuesto pensarlo muy bien antes de montar un negocio si no tienes descendencia estate quieto y sueña pero en la cama no en la vida. Tu ilusión te puede costar lo más valioso que una persona tiene: la salud y tu propia vida. Piénsatelo y mucho.