Gabriel Cruz
Nada justifica la muerte violenta de una persona.
En España, a fecha 31 de diciembre de 2017, figuraban desaparecidas 6.053 personas contando restos humanos sin identificar. Pero tu desaparición impactó de lleno en toda la sociedad a la que se le encoge el corazón, se humedecen los ojos, se hace un nudo en la garganta y las emociones emergen a flor de piel. Sentimientos que se incrementan al conocerse tú triste final. Sucesos que calan más hondo cuando se trata de menores.
¿Quién puede hacerle daño a un niño alegre, risueño y vivaracho como tú? Ante el interrogante me quedo en blanco y no se qué pensar o escribir. El dramatismo de tu muerte y las circunstancias que la han rodeado traspasa todos los límites imaginables. Estos monstruos con apariencia humana se superan en cada atrocidad que cometen.
Nada justifica la muerte violenta de una persona. Pero a veces el crimen por alguna causa perversa llega de la mano de depredadores sexuales, odios, celos, ajustes de cuentas, etc. Pero matar a niño de ocho años con el que convives es imposible encontrarle explicación.
Gabriel desde el cielo donde ya te encuentras interfiere ante el Todopoderoso para que estas mentes trastornadas se lo piensen antes de hacer daño a seres inocentes e indefensos como tú. Descansa en paz y a tus padres la fuerza necesaria para superar la perdida que ha producido tu adiós.