Homenajes a Buero Vallejo
Desde hace ya días observamos como en cien escaparates de nuestra capital se reproducen citas de libros de Buero Vallejo.
Desde hace ya días observamos como en cien escaparates de nuestra capital se reproducen citas de distintos libros del escritor, nacido en Guadalajara, ciudad en la que creció, estudió y volvió siempre que pudo, Antonio Buero Vallejo. Es una original forma de dar a conocer sus pensamientos a todos los ciudadanos en el año en que hubiese cumplido cien años. Celebrada ya esta misma efeméride con Camilo José Cela, llega el momento de recordar en toda su dimensión, humana y artística, al hombre al que Guadalajara ya honra con el nombre de un instituto y su teatro principal. El Ayuntamiento ha organizado los actos del centenario con una programación sencilla e intensa que tiene como objetivo la difusión de su obra a través de distintas representaciones o lecturas dramatizadas en diferentes escenarios. Es el mejor de los homenajes, ahondar en su legado, para tener presente el porqué de su consideración como el mejor dramaturgo español del siglo XX. Una placa en la puerta de su casa con una representación artística de Historia de una escalera servirá para que nunca olvidemos que este literato nació en la calle Miguel Fluiters, vivió su infancia en Guadalajara y tuvo siempre en su corazón y en sus referencias a su ciudad natal. Buero, que antes que escritor fue pintor- una exposición ya abierta y un libro que editará el Ayuntamiento nos mostrará la obra del joven que estudió Bellas Artes y desde los siete años ya dibujaba- recibió en vida numerosos y merecidos homenajes, entre ellos, los otorgados por este periódico, en forma de Populares, que recogió con el gran cariño y la amistad que le unió siempre con Nueva Alcarria, y que una vez más, ahora, le agradecemos, sumándonos a los reconocimientos que la ciudad ya le tributa. El más solemne y central será un día antes de celebrar su cien cumpleaños, en el teatro al que da nombre. Tal vez en la programación falte alguna referencia al grupo artístico ‘Antorcha’, de teatro aficionado, del que fue su gran valedor y que tanta importancia tuvo en la cultura de Guadalajara.