I Love Bardales o cómo recuperar una calle

El comercio de Guadalajara trabaja cada día por conseguir mejores servicios para sus clientes y mejor respuesta por parte de estos. En esta lucha tienen que emplearse a fondo especialmente los emprendedores del casco histórico que, en los últimos tiempos, han tenido que sufrir varios frentes, como la crisis, el envejecimiento poblacional, las obras, etc. Para plantarle cara al mal tiempo, un grupo de bares y comerciantes de la calle Bardales y alrededores ha iniciado un movimiento de ocio y cultura que se desarrollará en el entorno de esta zona para atraer al ciudadano y para convertir a Bardales en lo que era hace unos años: un hervidero de gente. La han denominado ‘I love Bardales’ y se ha estrenado con éxito (y quizá también sorpresa) entre la población. La propuesta apela a ‘viejas glorias’ como el loro de Bardales, el mítico pájaro que saludaba a los viandantes a su paso por la calle (y que falleció hace unos años). Por ello, es el icono protagonista de las placas de la calle Bardales desde ahora. Además de los descuentos, talleres o la ruta de la tapa de este fin de semana, entre otras actividades, a futuro ‘I love Bardales’ podría ser un clásico que revitalizara el centro, como lo son también los Jueves del Comercio, la Ruta de la Tapa u otras iniciativas dinamizadoras que tanto éxito están cosechando en los últimos años. El Ayuntamiento de Guadalajara y las federaciones de comercio (FCG y Fedeco) siguen apostando por nuevas iniciativas para salvar definitivamente la crisis y permitir que los ciudadanos de la capital no tengan que salir fuera para hacer sus compras o disfrutar de su ocio. La eterna duda es qué hacer con los fines de semana, ¿abrir o no abrir los sábados por la tarde? ¿y los domingos? La férrea competencia de Madrid daña severamente al comercio local con horarios que pocos pueden asumir. Quizá las rebajas, en ciertos sectores, salve este año la situación, puesto que se estima que sea una campaña bastante favorable. Entretanto, ‘I love Bardales’ ya apunta maneras y abre una nueva vía de esperanza para el comercio en el casco histórico.