La fiesta grande

Venimos ya desde hace tiempo escribiendo con un cierto pesimismo y casi por costumbre, pero poco convencidos de decir algo nuevo y menos que sirviese ese algo para que la situación actual en que nos movemos mejorase, y mucho, pues lo necesitamos. La Política nos tiene perplejos y no sabemos cómo vamos a salir de esta que también podríamos llamar crisis... y no pequeña. Pero como aunque todos somos políticos y cada cual podemos creer que lo que nosotros deseamos y propondríamos sería lo mejor, lo cierto es que estarán de acuerdo en que existe un cierto pesimismo e ignorancia sobre cómo van a solucionarse las cosas...empezando por esa formación de Gobierno que ya casi debe ser una necesidad más que urgente. Y como de política todos en teoría pensamos entender menos los que a ella se dedican que parece no se entienden, será mejor despachar el tema con el deseo de que entre todos, pero unos más que otros, antes que después, salgamos de  este impax.  Dicho esto y con el mejor deseo, queremos hoy hablar de esa Fiesta que está entre nosotros con toda su celebración, pues comamos y bebamos, como dijo alguien. Esto último seguro que no faltará y habría que recomendar con moderación. Ya hemos escrito en varias ocasiones aquello de que los niños en el Colegio mientras la música por la calle, pues eso parece que es lo que toca. No olvidamos, la fiesta y a ella invitamos aunque con moderación y guardando fuerzas para el trabajo que viene después.  Pero todos sabemos que tras la fiesta la tristeza, aunque sólo sean palabras que quedan bien y que ahora con el desempleo que todavía hay es un tesoro el que tiene un trabajo. Después, acabadas las fiestas llega la hora de ponerse las pilas, los niños en sus clases y los mayores en sus respectivos quehaceres. Sirvan estas líneas para dejar constancia de que en nuestra capital siguen celebrándose las Fiestas Grandes en honor de la Virgen de la Antigua, nuestra Patrona, y que las calles lo sienten y festejan. Podríamos añadir aquello de tengamos la fiesta en paz.Felices Fiestas, pues, a todos y que el curso que ya ha empezado sea bueno tanto para quienes cursan estudios como para quienes toca el turno del “curro” en general que ojalá haya para todos junto a esa felicidad tantas veces deseada.