La partida empieza en tablas

Tras meses de intensa actividad política, ayer pasada la medianoche, se daba el pistoletazo de salida oficial a una campaña electoral que se presenta como la más reñida de la historia de Castilla-La Mancha. Tanto es así, que aunque los comicios municipales pueden dejar más de una sorpresa, la atención se centra en saber si después de 30 años de Gobierno socialista, la comunidad seguirá siendo uno de los feudos del PSOE. Todos los sondeos marcan que la partida empieza en tablas, es decir que el empate técnico es casi un hecho. Tanto es así, que a nadie sorprendían ayer los datos del barómetro del CIS del mes de abril, sobre las elecciones autonómicas, y que apuntaban a que la candidata del PP a la Presidencia regional , María Dolores Cospedal, ganaría las elecciones al obtener 25 escaños, frente a los 24 que sacaría el candidato socialista y actual presidente regional, José María Barreda. Sin embargo, analizando en profundidad la encuesta se deduce que esa mínima diferencia de un escaño se hace aún más, si tenemos en cuenta que el presidente castellano-manchego es el mandatario autonómico mejor valorado por sus ciudadanos de entre los que optan a la reelección, con una calificación de 5,92 puntos y que los encuestados aprueban holgadamente al presidente mientras que la popular alcanza un 4,33, suspendiendo de nuevo. Pero no sólo eso, sino que el 36,4 por ciento de los castellano-manchegos considera que el PSOE ganará las próximas elecciones, frente al 35,3 por ciento que cree que lo hará el PP. Y es que preguntados por quién les gustaría que ganase los comicios, el 34,7 por ciento de los encuestados dice que el PSOE y el 34,4 por ciento afirma que el PP. Porcentajes todos tan ajustados que hacen lógico el esfuerzo ímprobo que ambos candidatos están haciendo y van a hacer por conseguir que se decante la balanza. Durante las próximas dos semanas veremos a ambos recorriendo cada rincón de la región pero no será hasta el día 22 hasta cuando se sabrá lo que dicen las urnas. Hasta entonces, mucho camino por recorrer y mucha campaña por delante de la que estén seguros les daremos puntual cuenta.