La región, referente a nivel nacional
Distintas publicaciones ponen a nuestra región como ejemplo o referencia en la gestión.
El mayor debate desde el inicio de la pandemia, hace ya once meses, lo ha constituido el hasta dónde llegar en las restricciones a la movilidad y las libertades de los ciudadanos para la protección de la sociedad frente al virus. El papel de los políticos, en tiempos en los que es necesaria la política con mayúsculas, ha de ser llevar la práctica las medidas que la ciencia marque y resolver las consecuencias de esta aplicación como gestores de los recursos públicos. Ese, con los datos en la mano, está siendo el camino seguido por el Gobierno regional. Castilla-La Mancha levantó ayer la severidad de un nivel 3 reforzado que adoptó hace veinte días por los buenos resultados obtenidos y lo seguirá haciendo gradualmente, si procede, en función de la evolución sanitaria. Y mientras actúa con responsabilidad hace lo que debe, invertir en sanidad y hacer llegar ayudas directas a los sectores más afectados, en concreto 145 millones de euros para pymes y autónomos, números que la convierten en la región que mayor porcentaje de su PIB ha dedicado a este objetivo. También, destinando 522 millones de euros, el 1,36% de ese mismo PIB a la actividad sanitaria, es la comunidad que en mayor porcentaje lo ha hecho ocupando los puestos de cabeza en trazabilidad de casos Covid.
Su esfuerzo presupuestario protege la salud pública y ayuda a los perjudicados, resaltando por los acuerdos conseguidos a través del diálogo social con empresarios y trabajadores. También fue de las primeras regiones en reunirse con las comunidades limítrofes para dar soluciones conjuntas a un mismo y único enemigo, el virus, y ha pedido uniformidad a nivel nacional en algunas decisiones porque la pandemia no conoce de fronteras. Además ha puesto en marcha una buena estrategia de vacunación que ha adelantado en un mes a lo previsto, la administración de la vacuna a los mayores de 80 años. Distintas publicaciones ponen a nuestra región como ejemplo o referencia en la gestión. Sabemos que no es tiempo de complacencia, que todo resulta insuficiente, pero los datos son estos y han de reconocerse.