Pactos de Gobierno

26/07/2016 - 22:24 Pedro Villaverde Embid

La película es parecida pero no la misma que el anterior film y el final del capítulo será diferente.

El martes pasado se constituyeron las nuevas cortes con la composición votada por los españoles en su segunda llamada a las urnas y se hizo con similar incertidumbre a la anterior legislatura y menos circo mediático. Todos vuelven a coincidir en que la repetición de las elecciones sería un fracaso de la democracia o de la clase política para a renglón seguido culpar al contrincante del bloqueo y justificarse. La película es parecida pero no la misma que el anterior film y el final del capítulo, creemos, si será esta vez la composición de un gobierno para poco o mucho tiempo, pero al menos para afrontar las necesidades más acuciantes de este país y la primera, precisamente, es tener un Ejecutivo que adopte medidas. El Partido Popular parece haber entendido que la composición del arco indica pluralidad, diversidad y por tanto que debe escuchar y ceder en parte de sus postulados para llegar a pactos y tiende la mano a las formaciones, claro está, no independentistas ni extremistas. El Partido Socialista sabe que su puesto es la oposición desde la cual defender sus posturas programáticas e ideologías y recuperar fuerza como líderes de la izquierda española. Por ello no puede negociar ni apoyar la investidura de un partido de derechas, lo que no quiere decir que su electorado no entienda incluso quiera una responsable abstención con el único fin de evitar otra llamada a las urnas que sería ruinosa económicamente para España y sobre todo para su imagen y crédito. Es la única postura que tiene sentido. Ciudadanos, por su parte, se muestra con lógica y en su línea, la de reformar sobre todo las maneras para prestigiar de nuevo las instituciones y la política dando un carácter más moderno y transparente a lo público. Al menos no bloquea. De Unidos Podemos tenemos lo que esperamos. Quedan pocos días o semanas para que se alcance la investidura en pleno verano, y me aventuro a pronosticar un gobierno en minoría del PP con acuerdos puntuales con Ciudadanos para asegurar la gobernabilidad  y la abstención final de los socialistas que seguro se suman para alguna reforma de calado por eso que llaman sentido de Estado. Los demás, salvo los canarios, y el PP debería atraer al PNV al que han comido la tostada en su región, dirán que no a todo lo que no sea que ellos estén en un gobierno.