Prudencia y calma ante el avance de Omicrón

La situación se va complicando por la escalada en el número de contagios de la nueva variante de la pandemia siendo llamativo el elevado porcentaje de positivos en los test que se practican, lo que dificulta el día a día en las casas con uno o varios de los miembros afectados y el resto pendientes de prueba o incrédulos ante su negativo, así como en los centros de trabajo donde las bajas causan problemas en el desarrollo de la actividad y en los lugares de atención médica que ven incrementada la demanda de servicio mientras merman sus medios por el confinamiento de su propio personal. En este escenario hay problemas hasta para la gestión de las bajas, la saturación del servicio es inevitable por mucho superhéroe que haya entre los sanitarios y los ciudadanos sufren sensación de abandono y cierta desorientación en cómo actuar más allá- que es lo que procede- de quedarse en casa ante el más mínimo síntoma o contacto con positivo- cogiendo con hoja de fumar el resultado del antígeno de limitada credibilidad-, tomar paracetamol, avisar a sus potenciales contagiados y esperar a que amaine el temporal. La situación obliga a la prudencia pero también a la tranquilidad porque el número de hospitalizaciones y la mortalidad respecto a olas anteriores es muy baja, un gran porcentaje de los ingresados en las unidades de cuidados respiratorios están sin vacunar o aquejados de complicaciones de salud previas y la experiencia demuestra que la inmensa mayoría lo pasa como apenas un resfriado. Calma también porque se está haciendo un esfuerzo extraordinario por vacunar deprisa a todas las franjas de edades para inmunizar- las vacunas son eficaces-, se están habilitando centros de diagnosis para aliviar la presión asistencial, estudiando nuevas vacunas y reaccionando desde el sistema público y la ciencia con profesionalidad, salvo excepciones que confirman la regla. Y en caso de encontrarnos bien nuestra tarea es continuar trabajando para que nuestras empresas y proyectos sigan su curso, la economía no se pare y las agendas se cumplan, por ejemplo Fitur en pocos días, siempre con prudencia, medidas extraordinarias de prevención , ánimo y confianza.