Religiosidad popular

En la recientemente pasada Semana Santa, en muchísimos pueblos y ciudades, han tenido lugar las procesiones de carácter religioso, de larga tradición en nuestro país. No cabe duda de que es una manifestación externa del sentir religioso de la gente que participó en ellas, que no era poca. Para muchos quizás sea una religiosidad superficial, pero para otros se trata de sentimientos y convicciones más profundas, transmitidas de generación en generación a lo largo de la historia. Y todo ello a pesar del laicismo que tratan de imponer, invocando la libertad de la persona. El ser humano es “religioso” por naturaleza. No se puede negar la evidencia.