Sigüenza y Huertapelayo

24/08/2024 - 18:58 Pedro Villaverde Martínez

Estamos pasando esto que llamamos verano en  Sigüenza, esta muy bella ciudad que no ha perdido para nada sus encantos para ser visitada y pasar unas horas, unos días…y unas vacaciones en ella. Tiene Historia en cada rincón que podamos visitar, que son muchos. Historiadores y escritores no le faltan para dar fe de ello.  Confesamos que no somos muy adictos a cantar y contar las bellezas que los lugares tienen, pero sin menospreciar otras muchas ciudades y pueblos de nuestra geografía provincial y hasta nacional, Sigüenza puede ser considerada como ciudad que atesora paisajes, monumentos, clima…y otras muchas bondades que la colocan en un puesto privilegiado, tanto que estamos convencidos de que debe ser declarada Patrimonio de la Humanidad, aunque no sepamos concretar lo que en la práctica ello supondría.  No somos seguntinos de nacimiento, pero seguramente sí de adopción si más de cincuenta años veraneando merece tal consideración, y desde luego, de corazón. 
    Cuando esto escribimos nos acordamos de las bellezas naturales de nuestro pueblo, Huertapelayo, una comparación que nos permitimos para que salga en la prensa el que nos vio nacer y en el que muchas veces tenemos puesto nuestro pensamiento y siempre nuestro sentimiento. Tiene naturaleza y también alguna bondad artística que aprovechamos para incitar a visitantes a contemplarlas. Sus paisajes, en pleno Alto Tajo, embelesan a los ojos y  su Iglesia exhibe un retablo que merece ser contemplado. Perdonad, amigos lectores, esta cuña que hacemos por amor al rincón que nos vio nacer, aunque en nada faltemos a la verdad al menos subjetiva. Lo cierto es que siendo lugares muy diferentes dentro de una misma provincia, no comparables, ambos enamoran después de una visita.  El espacio y nuestra ignorancia nos impiden que podamos  extendernos en sus respectivas virtudes pero acabamos recordando un dicho que siempre hemos oído: “Quien ha estado en Huertapelayo y Madrid, conoce lo mejor y lo peor”, que cada cual interprete.