Anós: “Me duele dejar al equipo así porque aquí me han hecho sentir los colores”

21/12/2010 - 11:14 Jorge Sánchez

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Foto: Nueva Alcarria
Después de dos temporadas y media de sacrificio, sufrimiento, compromiso e ilusión, Carlos Anós ha puesto rumbo a Tudela para afrontar un nuevo reto personal, ascender a División de Honor con el Ribera Navarra, actual líder de la División de Plata. El que fuera capitán del Gestesa Guadalajara admite que ha sido una decisión buena para las dos partes, pero “me duele dejar al equipo en esta situación. Hemos hecho lo que hemos podido. Aquí, gracias a la afición, me han hecho sentir los colores y cuando las cosas no iban bien, lo pasas muy mal. No ves una solución. El equipo ha mejorado, pero no lo suficiente”, comenta el ala maño que después del empate contra Cartagena cerraba de mutuo acuerdo con el club su rescisión del contrato para liberar una de las fichas más altas de la entidad morada.
“El ascenso a División de Honor es algo con lo que siempre he soñado. Quiero tener un éxito así en mi currículum”
Los números de Anós con el Gestesa se traducen en 72 partidos y 28 goles. En su primera campaña como morado anotó seis tantos y estuvo lejos de su verdadero nivel como él mismo reconoce: “Estaba fuera de casa y pequé de pardillo. Me costó adaptarme y fue un año difícil para mí por muchos motivos, pero creo que acabé esa temporada con buenas sensaciones”. En la segunda, el maño explotó y formó parte de la mejor temporada de la historia de un Gestesa capaz de todo que peleó hasta el final por colarse en la Copa de España y en los play-off. “Personal y colectivamente fue la mejor. El grupo estuvo a un excelente nivel y cumplimos los objetivos. Fue la temporada soñada”, destaca el ‘9’ morado que cerró esa campaña siendo un hombre determinante en el juego alcarreño y marcando 14 goles. Después de esa brillante temporada, Anós aceptaba la responsabilidad de ser el encargado de tirar del carro del proyecto más humilde de Honor y además ser el capitán de la nave. “Me marcó mucho. Tuve opciones de salir como el resto de mis compañeros porque lo pasamos muy mal, pero en verano me propusieron este reto y acepté. Me siento mal como responsable por no dejar al equipo en una mejor posición, pero sinceramente el equipo ha hecho todo lo que ha podido”, apunta.
El reto del ascenso
Anós piensa ya en su nuevo equipo, Ribera Navarra, que apostó fuerte por hacerse con sus servicios. Tanto que a pesar de las ofertas de Honor –una de las más suculentas la de Cartagena–, se comprometió de palabra con la directiva navarra hasta final de temporada y con opción a una más y la cumplió. “Es un reto personal que me llena de ilusión. El ascenso a Honor es algo con lo que siempre he soñado. Llevaba siete años en Honor y quiero tener un éxito así en mi currículum. Tengo muchas ganas de ayudar a mis nuevos compañeros a lograr el objetivo”, concluye.

“Me llevo muchos recuerdos y una guapa novia alcarreña”
Evidentemente la etapa morada de Carlos Anós ha marcado al maño en el aspecto deportivo y en el personal. “Me llevo muchos recuerdos y una guapa novia alcarreña –Aída–. Se me ponen los pelos de punta al recordar cómo retumbaban los bombos de la afición del Gestesa en el municipal. Todo eso hay que vivirlo y yo lo he hecho. Esta afición se merece mucho más que esta primera vuelta que hemos hecho. Deseo que el equipo se salve, pero sinceramente lo veo muy difícil porque sólo hemos podido sacar un punto. En la segunda, deberíamos sumar 25, algo que sólo han hecho los equipos de arriba. Está muy complicado, pero tienen que pelear hasta que no haya puntos en juego. Sé que no van a tirar la toalla y les doy mucho ánimo”, comenta el maño, que manda un mensaje a los que han sido sus compañeros: “Que aprovechen esta oportunidad única de jugar en Honor. Quedan cinco meses para disfrutar. Es un sueño jugar en la Mejor Liga del Mundo y deben aprovecharlo, que no bajen los brazos hasta el final. Les deseo mucha suerte”. En cuanto al técnico Carlos Sánchez Rozas, Anós matiza que “es un pedazo de entrenador, serio, trabajador, que ha puesto y pondrá toda la carne en el asador hasta el final y estos cinco meses que he compartido con él han sido buenos y me hubiera gustado haberle conocido más”. Y por último, sobre la directiva reconoce que “están intentando hacer lo mejor para el club y deseo que tengan suerte”, concluye el maño que siempre dejará para el recuerdo una sonrisa, un eléctrico regate y un disparo letal.