Collado: Se me cayó el mundo encima cuando me mostraron la roja''
19/02/2012 - 22:35
El delantero canario, en apenas un mes como jugador morado ya ha experimentado la cara y la cruz de la moneda. Si hace tres semanas se mostraba inmensamente feliz tras marcar el gol del triunfo ante el Numancia, esta vez probó en sus carnes el sabor de la amargura. Estoy fastidiado por la derrota y por no haber podido ayudar al equipo señaló. Cuando sales del banquillo con ilusión y te echan de esa forma por una injusticia... Se me vino el mundo encima, se sinceró a Nueva Alcarria. El ariete deportivista lo tiene claro: Por supuesto que no le hice nada, declara explicando que yo estaba hablando con el árbitro cuando alguien (Josetxo) me pegó un pisotón, además en el dedo malo y cuando me doy cuenta pega un brinco y se va al suelo. Lo siguiente que veo es al colegiado mostrándonos la roja a los dos. El colegiado valenciano redactó en el acta que Collado había sido expulsado por propinar un golpe con el puño en el estómago a un adversario tras haber sido objetivo de un pisotón por parte de este, estando el juego detenido. En este sentido, el jugador morado se muestra en total desacuerdo, es falso completamente y en las imágenes se podrá ver.
Dos goles ilegales
En relación a las dudosas decisiones arbitrales que pudieron perjudicar al Depor, el Muyayo también se moja. En cuanto al primer gol señala que desde mi punto de vista del banquillo se ve que hay un forcejeo con el portero y en teoría no se le puede tocar en el área pequeña. De hecho el reglamento es taxativo en estos casos. Si un jugador contrario toca, por leve que sea el contacto, al portero rival dentro del área pequeña, es falta siempre. Y sobre el 2-1 del Huesca, Collado cree que es en claro fuera de juego y si lo hubiese pitado habríamos sumado un punto muy bueno.
De todos modos, tampoco quiere hacer más leña del árbol caído y quita algo de hierro al asunto al afirmar: El árbitro es el que toma las decisiones, se puede equivocar tanto para bien como para mal y ya está. En definitiva, fue un partido raro, en palabras del canario. Fuimos a por la victoria pero no pudo ser. Nosotros lo que queremos es olvidar cuanto antes el mal sabor de boca de la derrota ante el Huesca, explicó.
Mala racha pero optimismo
Mientras, y tras haber sumado tan solo 3 puntos de los últimos 24 en liza, la situación se torna peliaguda para el cuadro de Terrazas. Los morados ya notan el descenso en el cogote pero en las próximas dos jornadas tendrán la posibilidad de redimirse ante dos rivales directos, y tras el resbalón ante el Huesca, sí que ya no se puede fallar más. Y menos en el Escartín. Con el pobre bagaje de siete derrotas en ocho partidos, la distancia con el descenso se ha reducido hasta los seis puntos. Villarreal B y Cartagena precisamente los dos próximos adversarios están empatados a 23 puntos y marcan la frontera con la permanencia. Por ello los dos próximos partidos van a ser dos finales para el Depor. En esta línea, Collado está convencido de que si jugamos como nos dice el míster, las victorias llegarán y finalizó lanzando un mensaje de optimismo: Estamos seguros de nosotros.