
El árbitro la lía en La Solana
23/03/2013 - 20:24
Desgraciadamente, los árbitros fueron los protagonistas en La Solana en un choque en el que las decisiones de los hombres de negro marcaron el devenir del juego y también el resultado.
El farolillo rojo de la tabla, el Marchamalo, fue capaz de plantar cara al poderoso Villarrobledo, que comenzó el partido creando mucho peligro en banda izquierda con un Kike Espinosa muy dinámico que desbordó una y otra vez en un vendaval que le costó sujetar al conjunto verdillo.
A los 11 minutos del encuentro llegó la primera jugada polémica. Javi Hernández se sacó un fuerte zapatazo desde fuera del área que acabó en el fondo de las mallas. Sin embargo, el juez de línea levantó el banderín interpretando un fuera de juego posicional que solamente vio él. Sin duda alguna, una polémica jugada que sería decisiva en el transcurrir del choque, más aún cuando se pasó del posible 1-0 al 0-1, obra de Javi Gómez, que se adelantó en el primer palo a la zaga verdilla cabeceando un saque de esquina botado por Carlos Pérez.
Corría el minuto 31, pero cinco antes la tuvo en sus pies Daoiz, que disparó al muñeco, solo ante el portero, tras recibir un buenísimo pase entre líneas de Javi Hernández, uno de los más destacados en las filas del conjunto gallardo.
Lejos de venirse abajo, el Marchamalo intentó sobreponerse a este varapalo inicial con varias ocasiones que anduvieron cerca de la portería albaceteña. Manolo lo intentó desde fuera del área, pero su disparo, defectuoso, se marchó a la derecha de la meta defendida por Javi López.
Por su parte, el Villarrobledo, también lo intentaba a balón parado, aprovechando la baza de la gran altura de muchos de sus hombres. En el 36, en una bonita jugada de estrategia en el saque de una falta, Isma colgó el esférico para Javi Gómez, que lo peinó para que José Mari disparase en el segundo palo. Sin embargo, Nacho se lució para mandar el balón fuera en una magnífica estirada.
La última oportunidad clara de estos primeros 45 minutos fue para Carlos Pérez, quien en una jugada de pícaro intentaba sorprender sin éxito a un adelantado Nacho, que veía cómo el balón se iba rozando el travesaño. Con la mínima ventaja para los albaceteños se llegaba al término del primer periodo.
Nada más comenzar la segunda mitad, en el 47, llegó otra de las jugadas polémicas del partido: el línea, el mismo que anuló el tanto verdillo, levantó el banderín en una galopada del rapidísimo Isma, quien incluso miró al asistente antes de enviar el esférico al fondo de las mallas. Al contrario que en el tanto invalidado de Javi Hernández, el árbitro no quiso ver la indicación de su linier y decidió que el 0-2 subiese al marcador, un hecho que levantó la furia de la grada de La Solana. Fruto de la impotencia llegaría la puntilla para el Marchamalo: algo debió decirle Manolo al árbitro para que viese la roja directa.
Los de Quique López se quedaban sin uno de sus jugones en el peor de los momentos. Con el partido ya resuelto para el Villarrobledo, el entrenador verdillo decidió dar entrada Jorge, una de las grandes promesas del Marchamalo que con tan sólo 18 años volvió loca a la defensa albaceteña en los 30 minutos que estuvo sobre el campo. Lo intentó insistentemente desde la izquierda, pero no obtuvo recompensa.
Israel y Rober, a la desesperada, pretendieron recortar distancias, pero sendos lanzamientos no vieron portería. A nueve minutos para la conclusión, y por si no fuera suficiente, el árbitro se inventó un penalti por mano de Nene dentro del área. El capi visitante, Vilchez, se encargó de tirarlo y de subir el 0-3 al marcador. Ya casi con el tiempo cumplido, el recién incorporado Abengozar envió el esférico a las nubes cuando encaraba solito ante Nacho.
En definitiva, un malísimo resultado para los de Quique López, que solamente conoce la derrota en sus dos partidos como entrenador verdillo, y un buenísimo resultado para el Villarrobledo en su lucha por jugar los play-off de ascenso.