El belga Weylandt se adjudica al sprint una etapa sin demasiada historia

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Ciclismo vuelta a españa
El joven ciclista belga Wouter Weylandt fue el protagonista de la decimoséptima etapa de la Vuelta Ciclista a España, jornada que discurrió ayer entre las localidades de Zamora y de Valladolid y que se llevó tras un apretado sprint por delante de Breschel y Usov. Además del centroeuropeo los protagonistas fueron Pedro Horrillo y José Ruiz, cuya fuga fue finalmente abortada por el pelotón. La clasificación general, que está prácticamente sentenciada, apenas sufrió cambios de significación.
El belga Wouter Weylandt, del Quick Step, se adjudicó el triunfo en la decimoséptima etapa de la Vuelta a España, que discurrió sobre 148 kilómetros entre Zamora y Valladolid, en un apretado sprint que no contó con el principal favorito, su compatriota y compañero de equipo Tom Boonen, que cesó en sus intenciones en el kilómetro final.
Weylandt, de sólo 23 años, logra así el primer gran triunfo de su carrera deportiva y redondea aún más una soberbia Vuelta a España de su equipo, un conjunto que suma ya cinco triunfos parciales, después de los dos de Bettini (en las llegadas a Toledo y Suances) y Boonen, en la tercera y decimosexta etapa.

‘Pinchazo’ de Zabel
El belga recogió el testigo de su compatriota Boonen, que se dejó ir en el último kilómetro en un sprint muy justo porque no estaba ninguno de los ilustres. De hecho uno de ellos, el veterano Erik Zabel (Milram) perdió sus opciones por culpa de un ‘pinchazo’ cuando restaban tres kilómetros. Pese a sus esforzados intentos, el velocista germano no pudo luchar en el sprint en una jornada de nuevo plácida para los privilegiados de la general.
El guión, de hecho, no se distanció en exceso del de la etapa precedente, aunque hoy no hubo ‘huelga’ entre los corredores. La fuga de la jornada fraguó en el décimo kilómetro. Los valientes fueron Pedro Horrillo (Rabobank) y José Ruíz (Andalucía-Cajasur), que hicieron hueco con el permiso del gran grupo.

Labor de captura
Su máxima ventaja alcanzó los ocho minutos, pero la renta no fue más allá porque Silence-Lotto y Euskaltel decidieron poner fin a la misma, con la ayuda del viento favorable que permitió a los corredores llegar con un poco de adelanto a la línea de meta en Valladolid.
Los nervios sólo aparecieron en el tramo final, cuando sí que entró un poco de viento de costado. El Astaná, listo y preparado para guardar a su líder, dezhizo el pelotón aunque sólo se quedó cortado Boonen, que ya ofreció los síntomas de flaqueza que posteriormente le impidieron luchar por el triunfo.
Sin referencias en el sprint, Weylandt hizo grande su nombre en la Vuelta mientras la ‘nobleza’ de la ronda española vela ya armas para la cita final de esta competición, el próximo sábado en las rampas de Navacerrada, en una cronoescalada que pretende igualarse en espectacularidad y ambiente en las cunetas con el mismísimo Angliru.
Antes, en la jornada que se celebrará hoy, ya el decimoctavo capítulo de la Vuelta 2008, los 141 supervivientes de la ‘serpiente multicolor’ se subirán al sillín para recorrer los 167,4 kilómetros que separan la salida de Valladolid de la meta, que estará situada en Las Rozas. La llegada obligará a los ciclistas participantes a subir el alto de Los Leones, de tercera categoría, pues se sube por su vertiente más sencilla.