El Deportivo desaprovecha su último amistoso en el Pedro Escartín

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: PEDRO M. SANZ
Se dejó llevar por la relajación, empatando (2-2) ante el Rayo Majadahonda
Mucho debe mejorar el Deportivo en los próximos nueve días antes de que llegue su primer partido oficial el 25 de agosto en Pontevedra con la primera ronda de la Copa del Rey. El conjunto morado tan sólo pudo empatar (2-2) en el Pedro Escartín ante el Rayo Majadahonda, un equipo de Tercera. Los de Liñero se relajaron en exceso después de que a los 13 minutos ya ganaran 2-0. Pero la ausencia de intensidad, lógica en este tipo de partidos, provocó que el equipo madrileño empatara y destapara las carencias de los morados.
Muy aburridos y decepcionados se marcharon los 300 valientes aficionados que no fueron perezosos y madrugaron en un día festivo como el deldomingo para presenciar el quinto encuentro de la pretemporada del Deportivo, que le enfrentó al Rayo Majadahonda, de la Tercera madrileña, y que terminó empatando a dos después de que el conjunto morado dominara plácidamente el choque porque a los 12 minutos ya ganaba 2-0.
Pero este encuentro supuso una penitencia para el Deportivo. En un principio no tendría que haberse disputado porque todos los morados contaban con haber peleado durante el pasado fin de semana un puesto en la final del Trofeo de la Junta. Sin embargo y como el Toledo sorprendió al Deportivo en la primera ronda, hubo que buscar un rival para llenar ese vacío que dejó la eliminación en la copa regional a las primeras de cambio.

El árbitro no se presentó
Para colmo, al Comité de Árbitros de Castilla-La Mancha se le olvidó designar un colegiado para este choque, a pesar de que el Deportivo solicitó en tiempo y forma la presencia de un trío arbitral, algo a lo que tanto la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha como el Comité de Árbitros obligan a los clubes en los partidos amistosos de pretemporada porque, de lo contrario, son sancionados económicamente. Pues bien, en el Pedro Escartín no se presentó ningún árbitro. Estaba previsto Moratilla Dionisio, el alcarreño que pita en Segunda B, pero no acudió. Después de esperar y esperar, el club conoció que la designación nunca se realizó por parte del Comité. Así que no hubo árbitro. Tuvo que ser el jugador del filial y que sigue a prueba en el primer equipo del Deportivo, Rafa Espada, el encargado de impartir justicia en el choque.
Con todo esto, el choque fue un auténtico ‘bolo’ veraniego incluso con el balón ya en juego. Kike Liñero dispuso un once mezclando titulares y suplentes, dando descanso a los que más minutos habían jugado en la pretemporada. Así las cosas, Nabil ocupó la portería como titular por primera vez, jugando el partido completo, con Cerrudo y David Fernández, en los laterales; Quesada y Oinatz como centrales; Javi Soria y Rubén Cuesta, en el centro del campo, Ernesto, en la banda izquierda y Aníbal y Juanjo como delanteros. La banda derecha fue ocupada por otro jugador a prueba. Tras descartar a Valdeolivas, el club se ha fijado en Nico, un jugador de 22 años que procede del filial del Murcia y que jugó una hora a buen nivel, a pesar de que tan sólo llevaba un entrenamiento con el equipo morado.

Del 2-0 al desconcierto
No se había cumplido ni los dos primeros minutos y el Depor conseguía su primer gol tras un lanzamiento de falta botado por Rubén Cuesta como sólo él sabe hacer, colgado al área chica, donde Quesada peinó para superar al portero del Rayo Majadahonda. El centrocampista cordobés fue de lo poco que se salvó del Deportivo en la matinal de ayer, además de los 20 primeros minutos del conjunto morado, que jugó con cierta intensidad. Así, a los 13 minutos, llegó el segundo gol deportivista en una jugada que elaboró Ernesto por la banda izquierda, centrando al segundo palo para que Aníbal marcase a placer. Un lanzamiento al larguero de Rubén Cuesta en el minuto 15, de nuevo tras una falta lateral, significó el final del asedio morado a la portería rival.
Porque tras los 20 primeros minutos el Depor se relajó y desapareció del partido. Llegaron las imprecisiones defensivas habituales ya en esta pretemporada y el equipo madrileño recortó distancias en el minuto 28 tras un disparo raso de Robert desde la frontal que ningún jugador morado salió a tapar.
La segunda parte sobró… o no porque sirvió para evidenciar las carencias del Deportivo y que tiene que pulir en los próximos 10 días antes de que llegue el partido de Copa del Rey en Pontevedra. Los morados no encontraron su sitio en el campo, a pesar de que Liñero no se cansó de pedir intensidad desde el banquillo.
Jorge, Antonio Moreno, Oya y Míchel comenzaron la segunda mitad en sustitución de Oinatz, David Fernández, Javi Soria y Aníbal, respectivamente, pero el Depor no carburó. Una defensa bastante adelantada provocó una pérdida de balón en el centro del campo en el minuto 52 que el Rayo Majadahonda no desaprovechó. Robert vio una auténtica autopista para avanzar hacia la portería de Nabil, eludir a cada jugador morado que salía a su paso y marcar el 2-2.
De ahí hasta el final Liñero probó todo. Permutó las bandas entre Iván Moreno, que sustituyó a Nico a los 61 minutos, y Ernesto para que el ex del Alcorcón jugara por la derecha. A Cerrudo le cambió al lateral zurdo, mientras que también utilizó a Ernesto de media punta. Pruebas que sólo fueron eso, pruebas porque el técnico del Deportivo terminó muy “disgustado”, según comentó, con sus jugadores en este partido que significaba la despedida del Pedro Escartín.
El siguiente choque en el estadio alcarreño ya será oficial, el domingo 29, frente al Cerro Reyes en Liga aunque la próxima cita para los morados será el miércoles, en Almazán, ante este conjunto soriano de la Tercera División (20.00 horas) antes de visitar el día 25 al Pontevedra en la primera ronda de la Copa del Rey. Queda poco para lo serio.