El Deportivo Guadalajara vence y convence en su estreno con el Marbella
01/10/2010 - 09:45
Por: RUBÉN MARTÍNEZ.
Fútbol- Segunda División B
Por los pelos. El Guadalajara se estreno con victoria en su segunda temporada en la categoría de bronce del fútbol español. Ganaron los morados y con suspense. Tras dominar todo el partido, y gozar de las mejores ocasiones del encuentro, el equipo morado tuvo que esperar al minuto 75 para inaugurar el marcador. Rubén Cuesta que, junto a Jorge García fueron los mejores del encuentro, se encargó de materializar una pena máxima provocada por Iván Moreno. De esta manera, los alcarreños comienzan con buen pie, al igual que el año pasado, y se acuestan como líderes del grupo IV de Segunda B, aunque esto cambiará mañana cuando se complete el resto de la jornada.
El Guadalajara venció al Marbella y se hizo con los tres primeros puntos de la temporada, después de un gran partido del equipo alcarreño. Los morados superaron a los andaluces en todas las facetas del juego y, aunque con algo de suspense, lograron una victoria del todo merecida.
La primera ocasión de peligro vendría del lado visitante, tras una indecisión de Sanmiguel solventada in extremis por Quesada, pero sería un espejismo, ya que el Depor pronto se haría con el balón y con las ocasiones. Salvo este acercamiento, el Marbella sólo encontraba esperanzas de victoria en jugadas a balón parado. El primer tiempo fue soso, aburrido, las circulaciones de balón eran lentas y los dos equipos abusaron en exceso del juego directo. El Depor merodeaba el área con ahínco, pero no terminaba de generar peligro; el Marbella pululaba cómodo en esta tesitura. Jorge García, enorme en la organización de juego, se descolgó al ataque y, tras driblar a dos contrarios, disparó a la meta rival provocando la estirada de Ávila. Fue lo mejor del primer periodo. Sin grandes lujos el Depor controlaba la situación, sólo faltaba el premio del gol.
Por bemoles
Tras el descanso, algo cambió, el Guadalajara adelantó sus líneas y se fue con descaro al ataque. En defensa ya estaba Rubén Cuesta, que solventaba cualquier atisbo de peligro visitante. Los morados se hicieron con la manija del centro del campo y arrebataban el balón con rapidez a los visitantes. Poco a poco se fueron desmelenando Jorge García, Iván Moreno y compañía. Lambarri rozó el gol en un escorzo acrobático desde el suelo y Jorge García probó fortuna desde lejos pero el Guada parecía negado de cara a porteria. El Marbella estaba k.o. Renunciaba al balón y simplemente dejaba correr los minutos confiando en mantener el resultado inicial.
Comenzaba a impacientarse la grada que se reactivó con la salida de Villa por Alejandro. Iván Moreno creaba peligro por banda insistentemente hasta que Rios le derribó en el área cometiendo pena máxima. El árbitro, poco condescendiente con los locales durante todo el partido, lo vio. El encargado de lanzarlo, quien sino Rubén Cuesta. El cordobés no falló. Ahora le entraban las prisas por atacar al Marbella. Con el resultado en contra no le quedó más remedio a los naranjas que ponerse a atacar, pero ni aún así. El Guadalajara no cambió su manera de jugar y, en vez de echarse atrás, mantuvo el balón y aún tuvo ocasiones para agrandar las diferencias. Positivo además de los puntos, el haber dejado la portería a cero y la gran sociedad que existe entre Rubén Cuesta y Jorge García para el mediocampo.
La primera ocasión de peligro vendría del lado visitante, tras una indecisión de Sanmiguel solventada in extremis por Quesada, pero sería un espejismo, ya que el Depor pronto se haría con el balón y con las ocasiones. Salvo este acercamiento, el Marbella sólo encontraba esperanzas de victoria en jugadas a balón parado. El primer tiempo fue soso, aburrido, las circulaciones de balón eran lentas y los dos equipos abusaron en exceso del juego directo. El Depor merodeaba el área con ahínco, pero no terminaba de generar peligro; el Marbella pululaba cómodo en esta tesitura. Jorge García, enorme en la organización de juego, se descolgó al ataque y, tras driblar a dos contrarios, disparó a la meta rival provocando la estirada de Ávila. Fue lo mejor del primer periodo. Sin grandes lujos el Depor controlaba la situación, sólo faltaba el premio del gol.
Por bemoles
Tras el descanso, algo cambió, el Guadalajara adelantó sus líneas y se fue con descaro al ataque. En defensa ya estaba Rubén Cuesta, que solventaba cualquier atisbo de peligro visitante. Los morados se hicieron con la manija del centro del campo y arrebataban el balón con rapidez a los visitantes. Poco a poco se fueron desmelenando Jorge García, Iván Moreno y compañía. Lambarri rozó el gol en un escorzo acrobático desde el suelo y Jorge García probó fortuna desde lejos pero el Guada parecía negado de cara a porteria. El Marbella estaba k.o. Renunciaba al balón y simplemente dejaba correr los minutos confiando en mantener el resultado inicial.
Comenzaba a impacientarse la grada que se reactivó con la salida de Villa por Alejandro. Iván Moreno creaba peligro por banda insistentemente hasta que Rios le derribó en el área cometiendo pena máxima. El árbitro, poco condescendiente con los locales durante todo el partido, lo vio. El encargado de lanzarlo, quien sino Rubén Cuesta. El cordobés no falló. Ahora le entraban las prisas por atacar al Marbella. Con el resultado en contra no le quedó más remedio a los naranjas que ponerse a atacar, pero ni aún así. El Guadalajara no cambió su manera de jugar y, en vez de echarse atrás, mantuvo el balón y aún tuvo ocasiones para agrandar las diferencias. Positivo además de los puntos, el haber dejado la portería a cero y la gran sociedad que existe entre Rubén Cuesta y Jorge García para el mediocampo.