El Deportivo, ni aprueba ni suspende

El Deportivo Guadalajara pasó este sábado un nuevo examen de cara a esos deseados play off de ascenso a Segunda División. Enfrente un Cartagena que demostró el porqué es el segundo clasificado y que se presentaba cómo perfecto sparring para los morados. El resultado del test dejó luces y sombras. Luces porque, por momentos, los locales demostraron estar por encima de su rival. Sombras porque una vez más el Depor no pudo sumar los tres puntos ante uno de los ‘cocos’ de la categoría. Un pequeño lastre del que convendría deshacerse cuanto antes. Bien es cierto que los tiempos alcarreños son diferentes al del resto de conjuntos de la Segunda B tras sufrir un verano tan atípico sin apenas pretemporada.

Lo que empieza a ser tradición en los duelos entre estos dos equipos es que los morados parten casi de salida en ventaja. Si en la Copa fue Toledo quien anotó en el primer minuto, este sábado fue Quique quien culminó la primera acción del choque. El cronómetro marcaba los 11 segundos cuando los locales ya celebraban el tanto del pichichi morado.

El Cartagena, exultante desde el viernes por el sorteo copero que les había ‘regalado’ al FC Barcelona, se vio por debajo en el marcador y con la obligación de dar un paso adelante. Lejos de acusar el golpe, los murcianos reaccionaron de forma inmejorable.

Apenas 12 minutos más tarde, Carlos David encontró el agujero en la zaga alcarreña y asistió a Fernando. El ariete, sólo ante Álvaro Campos, no se puso nervioso e igualó la contienda con un disparo raso. Una nueva cita comenzaba, pero ya ambos habían presentado sus credenciales.

El Pedro Escartín asistía a un partido ameno entre dos claros aspirantes a las cuatro primeras posiciones. Los fallos penalizaban doble porque ambas escuadras tenían pólvora y mucho empaque. Fallo que sufrió la zaga visitante al dormirse tras una acción a balón parado. Moyano lo vio y centró desde el costado izquierdo para la testa de Garrido. El central no tenía oposición, pero su remate en plancha no encontró puerta.

Fue la mejor oportunidad de la primera parte aunque ambas escuadras probaron suerte en el tramo final de ese acto. Por el Guadalajara con el protagonismo de Javi López; en el Cartagena con el omnipresente Fernando repartiendo juego como boya de la ofensiva visitante.

Tras el paso por vestuarios, la cita perdió algo de intensidad en las áreas. De ello se benefició un Cartagena más ensamblado que el Deportivo a estas alturas del campeonato. Sin embargo, el dominio visitante no se traducía en ocasiones claras de gol.

En el área contraria, el peligro se sentía cuando el esférico pasaba por Quique. Sobre todo en una media vuelta del ariete que no encontró la red por escasos centímetros. Salvachúa no estaba conforme y dialogaba con su segundo, Jorge, en busca de soluciones.

Y las encontró dando carrete a Jairo y viendo cómo el Cartagena perdía por lesión a su referencia ofensiva. Sin Fernando en el campo y con el Depor volvió a un esquema con un sólo punta, los morados retomaron el control y también las energías. Como en tantas otras ocasiones la cita iba a terminar en campo contrario.

Pero al igual que en el resto del choque, las ocasiones claras brillaban por su ausencia por lo que el dominio era estéril. Al final reparto de puntos que deja un cierto sin sabor entre los locales. Los resultados no acompañan ante los grandes, si bien es cierto que la estrambótica pretemporada invita a pensar que la mejor cara deportivista aún está por verse. Y mientras ésta llega, el Depor sigue a la estela de los play off.