El Impulse Balonmano Guadalajara empieza con mal pie en la Liga Asobal
El equipo de Juan Carlos Requena estuvo en el partido solo los primeros 20 minutos (33-28).
Tuvo un amargo regreso a la élite el Impulse Balonmano Guadalajara en Benidorm. El equipo de Juan Carlos Requena apenas pudo resistir menos de media hora el ritmo de un rival experto en la máxima categoría. Las paradas de Lantz-Pedersen y los goles de Poveda y Mielczarski no fueron argumentos suficientes para plantar cara a un adversario que supo manejar mejor los tiempos del partido. Tras 25 minutos equilibrados, el conjunto alcarreño se desplomó en el último parcial. Volvió a ilusionarse con la remontada en el inicio del segundo acto, pero el conjunto alicantino, dirigido con maestría por Nacho Valles, devolvió a los pupilos de Requena a la realidad.
El conjunto alcarreño tuvo una buena puesta. Consciente de las dudas de su rival, que firmó una mala pretemporada, salió decidido a imponer el ritmo del encuentro. Las paradas del danés Lantz-Pedersen y el acierto en ataque, sobre todo por parte de un Poveda muy inspirado, le dieron al equipo de Requena las primeras ventajas en el marcador ante un Benidorm incómodo y poco preciso en el lanzamiento.
El conjunto anfitrión le vio las orejas al lobo y recurrió a la mejor versión de su central, Nacho Valles, para girar el rumbo del partido. El jugador madrileño comenzó a repartir asistencias a los pivotes y a los extremos y el partido se igualó apenas dos minutos después (12-12).
El parcial se fue al 3-0, lo que permitió al Benidorm recuperar la delantera en el marcador ayudado por las pérdidas de pelota del Impulse, cada vez más ofuscado en ataque. La aparición en escena del portero alicantino Domenech, debutante en Asobal, frustró cualquier amago de reacción de la escuadra alcarreña.
El comienzo de la segunda parte fue ilusionante para el BM Guadalajara. Tras dos dianas del Benidorm, el equipo de Requena respondió con un parcial de 4-0 que dejó la diferencia en el marcador en sólo tres tantos. Pero un tiempo muerto del entrenador local cambió el partido definitivamente. En un visto y no visto, el cuadro alicantino recuperó los cinco goles de renta y la diferencia no hizo ya más que ensancharse, aunque en los minutos finales los visitantes maquillaron el resultado.
Ficha:
Servigroup Hoteles Benidorm: Witkowski, Ramiro Martínez (7, 1p), Oliver, Zhukov (1), Moscariello (4), Roca (4) y De Angelis (4) -siete inicial-, Domenech (ps), Vainstein (4), Sempere (4), Vila (1), Valles (4, 1p) y Zarikos.
Impulse BM Guadalajara: Lantz-Pedersen, Poveda (6, 2p), Lombardi (3), Falcón (1), Piña (3), Mielczarski (7) y Sladkowski (1) -siete inicial-, Gorostidi (3), Dorado, Palacios (1), Serradilla (1), Llorens, Nico García (ps), Simón (2, 1p) y Román.
Árbitros: Rodríguez Estévez (Colegio valenciano) y García Gil (Colegio aragonés). Excluyeron dos minutos a Oliver y Zhukov por el Benidorm, y a Piña y Dorado por el BM Guadalajara.
Parciales: 1-2, 3-5, 8-8, 11-8, 14-10, 16-11 (descanso), 18-14, 22-16, 25-20, 29-21, 31-23 y 33-28.
Incidencias: Palau d’Esports L’Illa de Benidorm. 800 espectadores.
