El Isover Azuqueca no da ninguna opción al Villarrobledo
Los de Sergio Vicente fueron muy superiores a sus rivales en todas las facetas del juego (85-69).
El Isover Basket Azuqueca aprendió la lección sobre la que se había trabajado toda la semana. Tenían que salir motivados al partido. Y vaya que si lo hicieron ante el Villarrobledo. Los de Sergio Vicente realizaron una salida en tromba que les dio una ventaja que ya no perderían en todo el partido. Tras el arrollador inicio -5 de 5 en tiros de 3-, aderezado con unas transiciones en las que Murray hundió en el aro rival, los locales dejaron roto el partido y ya no le perderían la cara en ningún momento.
El balón era para los visitantes tras ganar el salto inicial y Bruno Diatta adelantaba a los albaceteños en el marcador, 0-2. Pero lo que no esperaban los visitantes era que el Isover rompiera el partido con un 5 de 5 en triples, el primero de Murray, tres de Tomic y otro de Calvo. Intercambiando un parcial de 10-0, que les hacía mandar en el marcador a los cinco minutos del mismo por 24-8, lo que obligaba a Manuel Jiménez a pedir su primer tiempo muerto. Tras la llamada al orden, ligera reacción de los albaceteños, pero los locales seguían a los suyo e Hidalgo consiguió otro triple a 1:36 para el final del cuarto, y ponía la diferencia en +15 (29-12). Hasta el final del primer cuarto, el Villarrobledo ajustó la defensa y redujo la distancia a 29-15.
Al comenzar el segundo cuarto, los visitantes consiguieron un parcial de 0-4 que les acercó a 9 (29-20). Pero Luis Valera tampoco quería perderse la fiesta de los triples y anotaba desde más allá de 6,75. Poco después, Valera hundía el balón en la cara del pívot albaceteño y en la siguiente jugada tiro marca de la casa, que remató con otro triple Charly García completando un parcial de 10-2 para los locales y poniendo el marcador en +17 (39-22). Hasta el descanso, el Villarrobledo consiguió acercarse (45-34).
La superioridad local era tal que a la vuelta de los vestuarios, el conjunto azudense vivió minutos de relajación. Los roblenses consiguieron un parcial de 0-5 y bajar la diferencia a 9 puntos (45-36). Sin embargo, el Isover reaccionó con Tomic regalando asistencias de todos los colores. Cerraba el cuarto Tejera con un triple para dejar el marcador en +17 (67-50).
La distancia hizo que el último cuarto fuera el menos intenso, pero Sergio Vicente no quería relajaciones y pedía más concentración a sus chicos. Los visitantes lograron reducir distancias y Kalinicenko, ponía el luminoso en 73-62 a falta de 5 minutos. A partir de aquí el intercambio de canastas hacía que la ventaja se mantuviera y García y Tejera, con sendas canastas, cerraban el marcador: 85-69.