El judo, el deporte más recomendado para niños a partir de 4 años

09/06/2015 - 11:11 Alberto Moreno

La Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) declaró el judo como el mejor deporte inicial formativo para los niños a partir de los cuatro años. El organismo mundial apostó por esta disciplina olímpica ya que aporta una educación física integral, potenciando todas sus posibilidades psicomotrices y de relación con las demás personas. Se responde así a una de las preguntas que surgen en muchos padres cuando quieren que sus hijos se acerquen al mundo del deporte: ¿cuál es el mejor?, ¿cuál el más indicado para según qué edad?, ¿a partir de qué momento pueden pensar en la competición?
Practicar un deporte a las edades más tempranas aporta beneficios no solo a la salud de los pequeños, sino que también ayuda a su sociabilización y a su formación ética. Pero no todos los niños pueden realizar todas las actividades y suele haber deportes que se recomiendan para unas u otras edades. Del mismo modo que los adultos, los niños deben encontrar y practicar un deporte que les guste. Al principio puede costarles iniciar y seguir el ritmo, pero si el niño cuenta con el apoyo de sus familias, todo tendrá su camino.

Sin embargo, cuando los padres pretenden que sus hijos tengan una primera toma de contacto con el ejercicio físico, las dudas llegan: ¿cuál es el deporte más indicado?, ¿a qué edad es conveniente que se acerquen a él?, ¿la competición es recomendable? Estas preguntas son frecuentes y cada actividad física ofrece sus virtudes. Sin embargo, recurramos a un organismo internacional como la Unesco para hallar una respuesta. Y es que la organización declaró el judo como el mejor deporte inicial formativo para niños y jóvenes a partir de cuatro años.

Alberto López es profesor de la Escuela de Judo tradicional Inokuma de Guadalajara y suma casi dos décadas formando a niños. Su explicación sobre las virtudes de este deporte es clara. “Gracias al judo se desarrolla la psicomotricidad en los niños; trabajan la lateralidad, tanto por la derecha como la izquierda, potencian la flexibilidad, la coordinación, el equilibrio. Además, el crecimiento muscular es bastante homogéneo, también fomenta la orientación espacial, mediante las caídas”, enumera. Pero además, López relata que para los niños que son muy tímidos este deporte “les ayuda mucho a combatir esa timidez y a los que son más inquietos, les ayuda a canalizar una posible agresividad, sirviendo como una válvula de escape”. También, añade el profesor de Inokuma, el judo “aporta una disciplina y valores como la amistad, la participación, el respeto a los demás y el esfuerzo por mejorar”.

El progreso
“Somos de los clubes de España que tenemos un tiempo más largo de permanencia con nosotros”, dice y descubre que “en la escuela vamos viendo cómo progresan motrizmente y también en cuanto a madurez psicológica. La mejora en los niños es notable en todos los aspectos y cuando vienen niños con algunos problemas, el judo les ayuda muchísimo”. Pero no solo la Unesco apuesta por esta práctica. Recientemente la Universidad de Castilla-La Mancha recibía el premio europeo a la mejor investigación en judo del año 2014, otorgado en Estambul (Turquía). El trabajo constata los mayores beneficios de la práctica del judo durante la Educación Primaria frente a deportes colectivos como el fútbol o el baloncesto. La conclusión de este trabajo, es que había diferencias “muy significativas de mejora” de los que practicaban judo, particularmente “a nivel de fuerza muscular y resistencia cardiovascular”.

A partir de los 8 años se comienza ya a realizar un trabajo específico de las técnicas de judo y sobre los 14 años ya habrá un trabajo pleno como deportistas o como futuros deportistas de elite. No obstante, Alberto López incide en que “lo que diferencia al judo de otros deportes, a parte de la preparación física es la apuesta por los valores, el honor, el coraje, la cortesía, la educación, que debería ser así en todos los deportes, pero en algunos se deja de lado para priorizar la competición”. Y si el niño apuesta por continuar progresando y se decanta por la competición, López avanza que siempre es dentro del “respeto al entorno, incluyendo al juez, al compañero o al rival”. De todas formas, el judo es solo una de las actividades físicas a las que puede acercarse un niño. Cualquier otro ejercicio que realice el pequeño le dará beneficios a nivel físico, ya que le ayudará a fortalecer su musculatura, tener una buena salud cardiovascular y mantener un correcto peso corporal. También le beneficiará en aspectos emocionales y en el desarrollo de valores necesarios para la vida en sociedad, tales como el respeto, la responsabilidad, la cooperación, la igualdad, la tolerancia y la amistad.