El Marchamalo cumple, pero necesita más

12/05/2013 - 22:21 A.G.H.

Final agridulce. El Marchamalo hizo lo que tenía que hacer, ganar al Torrijos y sobrepasarle en la clasificación. Era la clave. Sin embargo, nadie esperaba que el Ciudad Real ganara en La Fuensanta conquense ni que empatase ante el Talavera en su feudo. Un rival inesperado y que después de la penúltima jornada tiene la llave de la permanencia en su poder. Y es que, gallardos y manchegos están empatados a puntos, pero los segundos tienen a su favor el golaverage.
Aún así, el Marchamalo cumplió y demostró que se merece estar la temporada que viene en Tercera División. Y es que, los campiñeros fueron superiores desde el minuto 1 hasta el 90. Sin realizar un juego brillante, las ocasiones llegaban.

La primera para Daoiz que no llegó al pase de cabeza que le pone Rober. Poco después, el capitán verdillo la volvía a tener. Corría el minuto 11 cuando Javi Hernández probaba la flexibilidad de Córdoba. En el rechace, el ‘14’ hacía lo propio con los reflejos del meta toledano. Sin embargo, no fue hasta el minuto 41 cuando los locales consiguieron batirle. Error garrafal en la defensa de una falta y De la Plata abrió la lata con un derechazo raso y fuerte. Sin tiempo para reaccionar, Israel fusilaba a Córdoba tras una gran contra gallarda. Ya en el tiempo de descuento, el Marchamalo pudo sentenciar, pero Rony no llegó a un pase de la muerte de Javi Hernández.

Así las cosas, 2-0 y toda la segunda parte para defenderlo. El segundo acto comenzó con ritmo y con Miguel Pérez intentando un imposible. Batir de vaselina y desde la línea de tres cuartos a Córdoba. Poco después, el Torrijos cogía el toro por los y se escudaba en las acciones a balón parado para inquietar la meta local. Nacho salvó el primero de Toni en el 51, pero no pudo hacer nada con el remate de Tomás en el 58.

Los rojiblancos recortaban distancias y la tensión aumentaba en La Solana. Sin embargo, el Torrijos no inquietó lo suficiente para pensar que el empate podría llegar. Eso sí, el partido tenía más pinta del 3-1 que del 2-2, pese a la desazón local. Y, efectivamente, llegó. Córner botado por Nene al corazón del área y remate preciso y certero de Illana al fondo de las mallas. El Marchamalo cumplió con su parte. El problema, que el Ciudad Real también con la suya.