El partido que se juega en cuatro canchas
24/05/2013 - 19:53
Solo una aciaga carambola dejaría al Quabit Guadalajara fuera de la fiesta de la Asobal la próxima temporada. Sería una complicada casualidad que pasaría porque los alcarreños no sumasen en el Palau (algo probable) y que el Octavio ganase en Huesca (muy complicado), que también el Cangas se llevase la victoria de Aranda (realmente difícil ya que los arandinos también se juegan la permanencia) y que el Cuatro Rayas Valladolid puntuase ante el Atlético de Madrid (improbable). Todas estas combinaciones se deberían dar en esta última jornada para que los de Guadalajara hiciesen de su visita al mítico feudo del FC Barcelona un valle de lágrimas.
Así, en la plantilla alcarreña, solo se habla de salvación. Y es que el triunfo de la pasada semana ante el BM Aragón fue el premio al trabajo de los de Garralda. El entrenador del Quabit reconoce que nunca había visto una temporada tan igualada. De hecho, con 20 puntos nunca había bajado nadie y ahora los tenemos varios equipos y no estamos tranquilos en la última jornada.
Garralda, aunque analiza todas las combinaciones posibles que podrían dejar al equipo en División de Honor B, tiene claro que para no mirar a otros rivales, tenemos que ganar a Barcelona, pero no oculta que es algo muy complicado.
El navarro, que reconoce que su equipo viaja a tierras catalanas con la ilusión de un niño porque vamos a un pabellón histórico, indica que cuando un equipo, da igual lo grande que sea, no está a su nivel y el rival sí cumple, puede pasar apuros, como de hecho ya ha ocurrido esta temporada con el Atlético de Madrid o el propio Barcelona. De todas formas, Garralda descubre que a pesar de todo, mis cuentas pasan más porque pinchen los rivales, antes de que nosotros ganemos en el Palau. Para la cita, Garralda perderá a Víctor Tremps, por sanción.