El Rugby Guadalajara estrena su casillero de victorias

El Guada se presentó a la cita con todas sus armas y más ganas que nunca de sacarse la espinita de las anteriores derrotas y de ofrecer lo mejor de él a su público en su primer partido en casa. Se encontraron con un Arquitectura con mucha ilusión, pero demasiado inexperto. En la primera parte los alcarreños hicieron un despliegue de buen juego, sobre todo en los primeros minutos, dejando 36 puntos para el descanso y un rival que no estrenó su marcador. Numerosas carreras de los tres cuartos morados hicieron las delicias de los espectadores. Mientras, los atléticos luchaban por mantener su defensa a duras penas, sin apenas probar el sabor de la posesión del oval. La segunda parte varió poco respecto al predominio del partido: esta vez los alcarreños eran los directores de orquesta. Sin embargo es necesario recalcar algunos detalles. En primer lugar, los visitantes seguían muy descolocados, dejando amplios huecos que serían aprovechados por el Guada, pero consiguieron jugar más tiempo con balón. Aunque el principal problema del Rugby Atlético Arquitectura fueron sus continuos golpes de castigo debidos, en parte, a la inexperiencia de muchos jugadores.

Por otra parte y a pesar de la victoria, el Guadalajara tendrá que hacer algo de examen de conciencia, puesto que experimentó algo que le pasa con frecuencia: contagio del juego contrario. Es decir, en esta ocasión, sus rivales jugaban descolocados, con pocos placajes y sobre todo con juego de delantera; entonces los alcarreños empezaron a hacer más fases y comenzó a extenderse la desorganización, lo que facilitó los dos ensayos contrarios.