El Tajo se une al cumpleaños del Descenso

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Por: Redacción
PIRAGÜISMO
El río Tajo sabía ayer que estaba de aniversario. El tradicional Descenso, que organiza el Club Piragüismo Trillo, con la colaboración del Ayuntamiento ribereño y la Federación de Piragüismo de Castilla-La Mancha cumplía los 20 años de existencia. Una fecha, que el propio Tajo quiso celebrar aportando un caudal mucho mayor que en el de ocasiones anteriores, lo que hizo que la competición resultase todo un éxito.

En total han sido 80 piragüistas de más de 16 años los que se han lanzado al río en la playa de Morillejo a lomos de 50 embarcaciones en el que “probablemente haya sido el año en el que el caudal ha sido mayor de todos en los que se ha disputado la prueba”, comentaba el presidente del Club de Piragüismo de Trillo que organiza la prueba, José Luis Bodega. La salida ha sido nuevamente del tipo Sella, es decir con los piragüistas fuera del agua, con la diferencia de que los jueces de la prueba han trazado una línea desde la que los competidores debían iniciar la carrera hasta las embarcaciones.
Las riadas de este año han despejado el cauce, lo que ha significado una mejora sustancial de los tiempos, cifrada en una media de tres minutos con respecto a las mismas categorías con respecto al año pasado. Se han inscrito trece clubes distintos de diferentes comunidades autónomas como Madrid, Extremadura, por supuesto de Castilla- La Mancha, e incluso un Club Portugués. “Después de 20 años los deportistas siguen viniendo a participar, lo que nos indica que la nuestra es una prueba con solera, querida, la gente disfruta y nosotros nos motivamos con ello”, añade Bodega. Por su parte, el alcalde de Trillo, Francisco Moreno, que ha sido esta tarde espectador de la prueba y estará presente esta noche en la entrega de trofeos ha querido “felicitar al Club de Piragüismo por la organización de la prueba de este año, una vez más impecable, y también y sobre todo por su trayectoria que llegaba hoy a las veinte ediciones”.
El gran triunfador de la tarde ha sido el Club Piragüismo Cuenca, ganador de la competición por equipos. La primera embarcación en llegar a la meta, doscientos metros aguas abajo del Puente sobre el Tajo de Trillo, ha sido el K2 senior compuesto por los palistas Alberto Lumbreras y Javier Morillas. Lo hacían en 52 minutos y 6 segundos. Lumbreras había ganado en las dos últimas ediciones del descenso en categoría K1 senior. Este año se imponía en el K2. Vencedores del K2 junior han sido los jóvenes piragüistas Adrián de Miguel y Rafael López. Las dos tripulaciones pertenecían al citado Club conquense que practica en Júcar. En la categoría K1 senior se ha impuesto Pablo Zamora, remero del Club Piragüismo Las Grajas, también de Cuenca. El K1 junior lo ha ganado Pablo Baeza, del Club Piragüismo Cuenca. En el K2 veterano se imponían Raimundo Terres y Juan Andrés Terres, del Club Piragüismo Tajo, de Fuentidueña de Tajo (Madrid). En cuanto a las féminas, la ganadora del K1 senior ha sido Adriana, también del Club Piragüismo Cuenca. En el primer tramo de aguas tranquilas o “pista”, propiciado por la presa de Azañón en el que prima la potencia sobre la pericia, los palistas han volado. Después de un kilómetro de cauce estrecho, el Tajo se ensancha por el embalse dando en los cuatro kilómetros iniciales de la prueba toda la iniciativa a la potencia sobre la técnica. El paso de la presa por el canal habilitado al efecto significa el primer tercio de la prueba. En ese punto los primeros del K2 senior, Alberto Lumbreras y Francisco Javier Morillas, ya marchaban en la primera posición que mantuvieron hasta la línea de meta. De la seguridad de la prueba se ha encargado la demarcación de la Cruz Roja de Sigüenza, así como operarios del Ayuntamiento de Trillo. Raimundo Terrés del Club Piragüismo Tajo, lleva participando tantas ediciones como pruebas ha habido: “Tengo 55 años, practico en este mismo río, pero más abajo, con aguas más tranquilas en Fuentidueña de Tajo. Este año hemos bajado como nunca, de maravilla. No había troncos, ni impedimento ninguno en todo el recorrido. La prueba tiene un ambiente familiar excelente”.