Final de infarto en un nuevo triunfo dle Quabit BM
21/10/2012 - 19:31
El encuentro no comenzó muy bien para los alcarreños, muy espesos en defensa y con la exclusión de Rasic, el Academia Octavio se puso 0-2 en el electrónico. El especialista Coque Fontenla de pena máxima recortaba distancias de pena máxima. Sin embargo una nueva exclusión de Rasic dejó al equipo en inferioridad numérica.
El Quabit BM supo afrontar el varapalo con una buena defensa y con Radulovic y Nenadic muy inspirados en sus lanzamientos, llegando al minuto 10 con una desventaja de un tanto (4-5). Javier Fernández y Pablo Cacheda, muy veloz en ataque, fueron los mejores en el conjunto vigués. Los de Mateo Garralda no acababan de despertar y Juárez, desde los siete metros, ampliaba la ventaja a tres (5-8).
La exclusión de Germán Hermida fue aprovechada por los blanquiverdes, que ayer jugaron con su indumentaria negra. Coque Fontenla acercaba a los alcarreños en el marcador con un nuevo lanzamiento de pena máxima. Cien por cien de efectividad desde los siete metros. Un cañonazo de Radulovic volvía a poner a tiro de piedra el empate (7-8), que llegaría del brazo de Coque Fontenla. Un férreo marcaje en defensa y las buenísimas intervenciones de La Tarántula Gómez hicieron que el casillero vigués permaneciese durante nueve minutos.
Las exclusiones de Bozalongo y Javier Fernández dejaban a los dos equipos con seis en la recta final de la primera mitad. Quién si no, Sergio De la Salud, en una magnífica jugada personal, ponía por delante al Quabit BM.
Un trallazo made in Radulovic ampliaba la diferencia favorable a los alcarreños a dos. Confirmado: la furia alcarreña ya había despertado en el Multiusos. De nuevo el catalán, que siempre aparece en los momentos clave, se echaba el equipo a la espalda para hacer el 12-9. A cuatro minutos para el final, el Academia Octavio se quedaba con uno menos por la exclusión de Dasilva y Javi Parra ponía el 14-10, aunque Cerillo acortaría distancias sobre la bocina (14-11).
Los de Mateo Garralda se marcharon a los vestuarios con la tranquilidad que le daba este colchón de tres goles, aunque sin confiarse de un complicado rival que guardaba un as en la manga.
Ademán de reacción viguesa
El encuentro se reanudaba con un trallazo de Bozalongo ante el que nada pudo hacer el recién incorporado Pablo Chantada. Sin embargo, en dos buenas contras, el Academia Octavio redujo la diferencia a dos (15-13). Fran González metía el miedo en el cuerpo a los alcarreños, que veían cómo los vigueses se ponían a uno del empate.
Pero Coque Fontenla volvía a ampliar la ventaja a dos desde los siete metros. Las exclusiones de Nenadic y Radulovic fueron un jarro de agua fría para los de Mateo Garralda. Fran González aprovechaba esta circunstancia para llevar las tablas en el electrónico. Sin embargo, la exclusión de Ismael Juárez por una jugada antirreglamentaria sobre Edu Reig ponía las cosas algo más igualadas para el Quabit BM, que volvía tomar ventaja en el marcador con los goles de Bozalongo y Nenadic, que ponía el 18-16 nada más saltar a la pista.
De nuevo Bozalongo, en una rápida contra sin oposición, hizo el 19-16. Un nuevo bajón de los alcarreños y la inspiración de Pablo Chantada fueron aprovechados por Víctor Frade para acortar la diferencia a un tanto (20-19). Pero un nuevo cañonazo de Bozalongo volvía a ampliarla a dos (21-19). En este tuya y mía, Fran González hizo el 21-20 y Radulovic falló un lanzamiento a placer. El Academia Octavio tenía la oportunidad de empatar, pero Jorge Gómez lo evitó en una magnífica estirada a disparo de Dasilva.
Rasic lo intentó en una rápida contra en la que se quedó solo ante el portero, pero no era su día y el guardameta vigués desbarató su lanzamiento. Ambos equipos entraron en un correcalles lleno de imprecisiones, fruto de la ansiedad por conseguir la victoria. Pero Radulovic dio aires al cuadro alcarreño con el 22-20. Aún quedaban 12 minutos, todo un mundo, pero Edu Reig lograba ampliar la ventaja a tres (23-20). Una de cal y una de arena, porque 40 segundo más tarde el catalán fue excluido en una jugada muy protestada por la grada del Multiusos. Aquí estoy yo, debió pensar Sergio de la Salud cuando se sacó de la chistera el 24-20. El recién incorporado Polakovic disminuía la diferencia con un fuerte disparo ante el que nada pudo hacer Jorge Gómez.
Juárez, desde los siete metros, volvía a poner al Academia Octavio a dos de la igualada. A siete minutos para el final, De la Salud fue excluido por tocar el balón con el pie en una jugada muy discutida por la escuadra alcarreña. Había que calmarse y no cometer errores. De nuevo Juárez en una rapidísima jugada metía el miedo a los de Garralda, que veían cómo los vigueses se acercaban peligrosamente al marcador. El partido se estaba complicando y mucho para el Quabit BM. Pero allí estaban ellos: el superhéroe Jorge Gómez, que desbarató un fuerte disparo de Kallman y otro de Dasilva, y El Emperador De la Salud, que hizo el 25-23 en una buena contra de los alcarreños.
El Multiusos era una olla a presión. Víctor Frade, sin oposición llevaba el 25-24 y la emoción al marcador. ¿Qué nos depararía este final de infarto? Javi Parra cometía una falta en ataque y los vigueses tenían el empate, o quien sabe si la victoria, más cerca que nunca. Su entrenador, Enrique Domínguez, lo sabía y solicitó tiempo muerto para preparar una jugada con portero jugador en la pista. No le salió bien y la férrea defensa del Quabit BM evitó la igualada visitante. No hubo tiempo para más: importantísimos dos puntos para el conjunto alcarreño, que volvió a reencontrarse con la victoria.