Gonzalo Navarro, el último en caer lesionado
01/10/2010 - 09:45
Por: JORGE SÁNCHEZ. GUADALAJARA
BALONMANO DIV. DE HONOR PLATA
El lateral, con problemas en el gemelo, se suma a las bajas de Castellá y Gamuz
Las lesiones continúan cebándose con el Rayet BM. El último en caer ha sido Gonzalo Navarro. El lateral cartaginés sufría un tirón en su gemelo derecho que le hará perderse el próximo partido de su equipo ante el Cajasur Córdoba domingo, a las 12.30 horas en el San José.
Ya arrastraba molestias y durante el entrenamiento sentí un tirón que me molesta bastante. Aún no sé el diagnóstico del médico. Me harán pruebas, pero mis sensaciones me dicen que podría ser una pequeña rotura de fibras. Habrá que esperar, comenta el veterano lateral, al que le va a venir muy bien el parón de la competición para recuperar y estar disponible en Pamplona, en la que quizá sea la segunda final del Rayet BM en esta primera vuelta después de visitar Pozoblanco.
Espero estar recuperado para noviembre porque nos jugamos mucho en esos partidos contra Anaitasuna, Barakaldo, Teucro y Puerto Sagunto. Es importante mantenerse arriba durante toda la temporada y no bajar el ritmo, reconoce Navarro, quien después de estar dos años retirado intenta reencontrarse con aquel balonmano que le hizo internacional con la selección española, tanto en pista como en playa.
Me exigo mucho en cada entrenamiento. Quiero demostrarle a Fernando que soy el mismo que él conoce de aquella etapa en el CAI, pero aquellos dos años parado te cortan el ritmo y cuesta mucho más. Después de mi paso por Boadilla, en Guadalajara me he encontrado con un equipo serio y con una buena planificación de trabajo. Esta es una categoría muy exigente y hay que intentar mantener la misma concentración en cada partido, pero es difícil porque es una competición irregular, dice.
Espero estar recuperado para noviembre porque nos jugamos mucho en esos partidos contra Anaitasuna, Barakaldo, Teucro y Puerto Sagunto. Es importante mantenerse arriba durante toda la temporada y no bajar el ritmo, reconoce Navarro, quien después de estar dos años retirado intenta reencontrarse con aquel balonmano que le hizo internacional con la selección española, tanto en pista como en playa.
Me exigo mucho en cada entrenamiento. Quiero demostrarle a Fernando que soy el mismo que él conoce de aquella etapa en el CAI, pero aquellos dos años parado te cortan el ritmo y cuesta mucho más. Después de mi paso por Boadilla, en Guadalajara me he encontrado con un equipo serio y con una buena planificación de trabajo. Esta es una categoría muy exigente y hay que intentar mantener la misma concentración en cada partido, pero es difícil porque es una competición irregular, dice.