Gonzalo Ónega: “En el fútbol siempre se está preocupado, pero soy muy optimista”

¿Cómo de preocupado está Gonzalo Ónega con la situación del equipo?

En el fútbol siempre se está preocupado porque siempre tienes que ganar, pero estamos optimistas. A pesar de nuestra irregularidad estamos siendo regulares. Ahora toca un calendario que a priori es más asequible con equipos que están por debajo y que si ante ellos haces lo mismo que con los otros rivales, lo normal es que ganemos y que nos den los puntos para estar tranquilos.

Cada jornada se repite la misma tónica. El rival no es superior al equipo morado, pero no se gana.

De eso hago la lectura positiva, que es que no es lo mismo que tú vengas y veas un equipo que está falto de ideas, que no genera oportunidades, que no defiende bien… eso no ocurre con nosotros. Tenemos la sensación de ser superiores pero no terminamos de convertir eso en puntos.

¿Cómo está el vestuario después de las últimas derrotas?

Yo soy una persona muy positiva porque entiendo así el fútbol y la vida. No estamos en una situación delicadísima, pero si ganas en próximo día te pones en una situación diferente. No es una situación crítica y los jugadores están bien. Saben llevar la presión. Ya el año pasado tuvieron que llevar la presión de ir primeros y de ganar una liga. Haber vivido esas situaciones de presión es positivo y les veo bien.

¿Cómo se gestiona un vestuario que al principio de temporada luchaba por el título de campeón y el ascenso y ahora tiene que pelear por no caer en la zona peligrosa?

Uno siempre en la vida quiere ser campeón, pero luego las cosas no salen como a uno les gusta. El que sabe llevar esas situaciones vuelve a ganar y el que en esas situaciones se agobia o les genera duda, no vuelve a ganar nunca. Siempre tenemos expectativas altas que a día de hoy no se están cumpliendo, pero con la mentalidad de que esto es a largo plazo.

El calendario nos ofrece ahora tres enfrentamientos seguidos frente a rivales directos, Diocesano, Socuéllamos y Leganés B, ¿nos jugamos ahora toda la temporada?

Nos la jugamos en cada partido, pero sí es verdad que estos tres partidos nos pueden hacer vivir un año muy tranquilo o incluso si hicieras las cosas bien podría pasar alguna locura.

¿A qué locura se refiere?

Intento ser optimista y aunque es muy difícil todavía quedan ocho partidos…

La primera de esas ocho finales será este domingo en casa del Diocesano, colista.

Sí, es un colista que en los últimos cuatro partidos a empatado a cero. En su casa perdió el Melilla, líder de la categoría. Es un colista difícil que nos va a poner las cosas muy difíciles, pero vamos con todas las garantías de que si hacemos bien las cosas y tenemos esa fortuna de cara al gol, vamos a sacar los tres puntos.

No es ajeno a las críticas de parte de la afición, ¿las entiende?

Yo también criticaría porque creo que cuando un equipo no gana estás expuesto a las críticas y es positivo porque es una afición muy exigente y eso nos hace mejores. Uno cuando decide coger esta profesión de entrenador sabe que cuando gana recibirá elogios y cuando pierda recibirá críticas. Es entendible y espero convertir esas críticas en elogios muy pronto.

¿Siente el respaldo del club?

Siempre lo he sentido. Desde que estoy aquí siempre lo he tenido y estoy muy agradecido a todos, desde Néstor, Hernán, Carlos, Paco… Eso es importante para un entrenador, trabajar de manera tranquila y siempre ha ocurrido aquí.

Por lo que veo, todo volverá a su cauce con victorias.

Eso es. La única solución de que un club vaya bien es conseguir victorias como se consiguieron el año pasado y como ha ocurrido este año. Tenemos que aprender mucho, terminar la temporada de manera fuera, con positivismo y ver el año que viene en qué cosas podemos mejorar.