La cofradía del clavo ardiendo cuenta con dos nuevos invitados
26/03/2011 - 20:01
Siendo la Liga una carrera de fondo, el Azuqueca se prepara para afrontar el último esfuerzo, un sprint final del que saldrán los nombres de los cuatro equipos que pujarán por ascender a Segunda División B. Los azudenses quieren sin duda ser uno de ellos y volver a vivir la experiencia del play-off como ya sucediera el año pasado. Tras la disputa de 30 jornadas, los de Quique López repiten otra temporada más en la zona noble de la clasificación y se jugarán su futuro cercano en ocho jornadas agónicas. Del mismo modo, el Criptanense, sempiterno farolillo rojo y que abandonó esa condición la semana pasada, rema contracorriente para intentar eludir un descenso, que pareció utópico hasta hace apenas un puñado de jornadas.
Los azudenses están bien posicionados aunque a una leve distancia de sus rivales, son sextos a un punto del Illescas que ocupa la quinta plaza y a seis de Almansa y La Roda, tercero y cuarto respectivamente. No obstante, hay un dato halagüeño y que multiplica exponencialmente las opciones de acceder a las eliminatorias por el ascenso y ese es el caso Albacete. El conjunto manchego se encuentra en una situación delicada en Segunda División a nueve puntos de la UD Las Palmas, que marca la frontera con la permanencia y podría perjudicar a su filial, el Alba B, que marcha segundo en Tercera y se encuentra ante la posibilidad de acceder al play-off. El caso es que si al término de la Liga en Tercera el próximo 15 de mayo, el Albacete (al que aún le restarían tres jornadas en la categoría de plata del fútbol español) se encuentra matemáticamente descendido, el Albacete B no podrá disputar ese play-off al que sí accedería entonces el quinto del grupo castellano-manchego de Tercera. El Illescas y el Azuqueca son conscientes de ello pero también el Villarrubia o el Marchamalo sueñan con poder alcanzar esa quinta plaza y por ello este tramo de final de temporada va a resultar apasionante. El primer obstáculo de esta carrera para el Azuqueca vendrá este mediodía (12.00 horas) ante un rival asequible a tenor de lo visto durante la temporada, el Criptanense. En teoría pero sólo en teoría, éste podría ser el partido más sencillo de los que nos quedan pero hay que ganar en el campo, tenemos mucho que perder y poco que ganar, no podemos pensar que lo tenemos ganado de antemano, avisó Quique López que reiteró en esta línea: Si hacemos las cosas bien y no les damos opciones, ganaremos pero si les damos vida, nos pueden dar una sorpresa. Los ciudarrealeños llevan toda la temporada en lo más profundo de la tabla pero en los últimos partidos han sumado dos victorias las únicas que atesoran en su haber y casi sin presión están aferrándose a un clavo ardiendo, al igual que el Azuqueca, que quiere acceder al play-off. Por ello será un partido en el los nervios de acero serán el jugador número 12. Ellos tienen casi asumido el descenso y jugando sin presión han sacado magníficos resultados, señala el técnico rojinegro. Dos objetivos contrapuestos, ascenso y permanencia, pero con la misma ambición de victoria harán de este envite un atractivo duelo en el San Miguel y que servirá de ante sala al derbi ante el Marchamalo del próximo domingo. La buena noticia para Quique López es que cuenta con la plantilla al completo a excepción de Alberto Ongil, que se perderá lo que resta de temporada al verse obligado a pasar por el quirófano por su rotura de ligamentos.