Lakers renacen y fuerzan el séptimo partido contra Boston
01/10/2010 - 09:45
Por: EUROPA PRESS
Baloncesto nba
Gasol roza el triple doble 17 puntos, 13 rebotes y 9 asistencias
No sólo salvaron el match-ball en contra, sino que volvieron a recuperar las sensaciones de equipo campeón que parecían haber olvidado en el TD Garden de Boston, y destrozaron a unos Celtics incapaces de frenar el torrente de energía, motivación y baloncesto total planteado por los de Jackson, que jugaron su mejor encuentro de la serie.
Y es que el viaje a Los Angeles -que será también escenario del duelo definitivo, la madrugada del próximo viernes- pareció haber provocado sensaciones enfrentadas en ambos conjuntos. Los Lakers, faltos de chispa en Boston, salieron encendidos y pronto demostraron a su rival que sólo había un ganador posible para el sexto encuentro, y ése no eran los Celtics.
Con un aplastante dominio del rebote y una defensa asfixiante, los locales, arropados por un especialmente animoso Staples Center, sentaron la base de una victoria que el equipo se encargó de confirmar de forma coral en ataque. Y es que, pese a estar nuevamente liderados por Kobe Bryant (26 puntos y 11 rebotes), y Pau Gasol, que volvió a brillar con luz propia y se quedó al borde del triple doble (17, con 13 rebotes y 9 asistencias), fueron Ron Artest y los suplentes, dos de los elementos más criticados por su falta de consistencia en las Finales, los que se sumaron a la ofensiva y acabaron decantando la balanza de forma tan evidente.
Artest (15 puntos) estuvo inspirado desde el exterior, mientras el banquillo angelino le ganaba totalmente la partida al de los Celtics, con Odom, Vujacic y Brown demostrando sus cualidades al unísono. De los Celtics, no hubo noticias. O al menos ninguna buena, porque al desaparecido Rondo se unió la tempranera lesión de Kendrick Perkins, que abandonó el partido en el primer cuarto por una lesión de rodilla que le hace ser duda para el séptimo partido.
Allen, Pierce y Garnett, los únicos que mostraron destellos puntuales, no pudieron más que ver como un huracán se les venía encima, sin poder hacer más que taparse y dejar que asolara el encuentro a su merced. La eliminatoria queda igualada.
Con un aplastante dominio del rebote y una defensa asfixiante, los locales, arropados por un especialmente animoso Staples Center, sentaron la base de una victoria que el equipo se encargó de confirmar de forma coral en ataque. Y es que, pese a estar nuevamente liderados por Kobe Bryant (26 puntos y 11 rebotes), y Pau Gasol, que volvió a brillar con luz propia y se quedó al borde del triple doble (17, con 13 rebotes y 9 asistencias), fueron Ron Artest y los suplentes, dos de los elementos más criticados por su falta de consistencia en las Finales, los que se sumaron a la ofensiva y acabaron decantando la balanza de forma tan evidente.
Artest (15 puntos) estuvo inspirado desde el exterior, mientras el banquillo angelino le ganaba totalmente la partida al de los Celtics, con Odom, Vujacic y Brown demostrando sus cualidades al unísono. De los Celtics, no hubo noticias. O al menos ninguna buena, porque al desaparecido Rondo se unió la tempranera lesión de Kendrick Perkins, que abandonó el partido en el primer cuarto por una lesión de rodilla que le hace ser duda para el séptimo partido.
Allen, Pierce y Garnett, los únicos que mostraron destellos puntuales, no pudieron más que ver como un huracán se les venía encima, sin poder hacer más que taparse y dejar que asolara el encuentro a su merced. La eliminatoria queda igualada.