Manzanazo al Illescas
09/12/2012 - 17:44
Semana a semana el San Miguel va agrandando su sombra como un campo inexpugnable, un amuleto casi infalible para el Azuqueca. Los rojinegros ya son el mejor equipo del Grupo XVIII como local habiendo obtenido 22 de los 24 puntos en liza. Los últimos tres ante el Illescas, Manzanazo mediante, llegaron en la recta final de un encuentro muy equilibrado, sin grandes ocasiones para ninguno y sin grandes alardes.
El elemento diferenciador fueron las enormes ganas e ilusión imprimidas por los azudenses. No estuvieron finos, más bien espesos los de Miguel López pero nunca tiraron la toalla y en parte esa insistencia y esa inquebrantable lucha les ha llevado a ocupar la tercera posición de la clasificación, igualado a puntos con el Conquense.
Durante los primeros 45 minutos, el cuadro local dispuso de un mayor porcentaje de posesión pero jamás pudo atravesar la red defensiva tejida por el Illescas.
La baja de Esaú fue suplida por un voluntarioso Kevin Barrera actuando como nueve mentiroso. Emuló a Esaú en la presión pero apenas le llegaron balones para poder hacer efectiva su velocidad. Por detrás, Javi Robledo, Pascu y Roberto, los hombres de mayor talento rara vez consiguieron asociarse y solo algún chispazo esporádico de Pascu inquietó la meta defendida por Yosu. Del cuadro dirigido por Pablo Franco, nada punible en labores ofensivas.
Comenzó el segundo tiempo con la misma monotonía aunque a cuentagotas se fueron sucediendo las primeras oportunidades sobre todo en jugadas de estrategias. Guille cabeceó centrado un saque de esquina en el primer acercamiento tímido de los de fuera. Ese semisusto despertó al cuadro rojinegro.
Achucharon los anfitriones metiendo en la cueva a su rival y rozando el gol en varias acciones consecutivas de Roberto Izquierdo en sendos córners. Todas acabaron en el limbo. Después llegó la lesión de Paris, que se vio obligado a retirarse con una luxación de hombro. En su lugar entró Fran.
Los minutos pasaban y los goles no llegaban. Javi Robledo lo tuvo en sus botas en varios disparos consecutivos pero no estuvo acertado de cara a puerta. No debe tener ansiedad, los goles llegarán y en el San Miguel, que le conocen muy bien y saben de sobra de lo que es capaz. Se entraba de esta forma en el último cuarto de hora con 0-0 y las espadas en alto. Fue entonces cuando el Azuqueca se lanzó a por el partido, realmente fue el único que pujó fuerte por obtener los tres puntos. Los illescanos tomaron otro camino, el de intentar no perder pero les salió rana. Una última tentativa, más bien rácana, en un saque de esquina rematado por Ramera fue el último servicio en ataque para los blancos. Lo de después fue atarse los machos en defensa ante el asedio azudense.
Un gol anulado a Pancorbo por falta sobre el portero en el 81 fue el preludio de lo que sucedería instantes después. Y es que los últimos minutos en el San Miguel son molto longos como diría aquel. Así, Manzano recuperó un balón en la frontal del área y envió un obús que se coló con vehemencia por el centro de la portería illescana. Gol, triunfo y las puertas del play-off derribadas.