Marko Dzokic aprueba en su debut con la camiseta del Quabit BM Guadalajara

Marko Dzokic vuelve a sentirse jugador de balonmano. Atrás quedó todo el sufrimiento, el trabajo de rehabilitación y el esfuerzo por regresar a las canchas. El pasado mes de junio se vio obligado a pasar por el quirófano para superar sus problemas de rodilla –ligamento cruzado–. Seis largos meses en el dique seco y en octubre vuelta a los entrenamientos para que el 21 de enero el hispano serbio recuperara sus sensaciones con un balón en las manos y ante un rival de campanillas, o mejor dicho de Champions como el Cuatro Rayas Valladolid. Aunque fuera un amistoso para Marko fue un partido muy especial. “Me sentí muy cómodo. No estaba nervioso, sólo quería jugar y ayudar al equipo. Mis compañeros me arroparon y me sentí muy bien”, comenta el hispano-serbio, que además de gozar de sus primeros minutos con la camiseta del Quabit BM Guadalajara también marcó un gol, llevándose la ovación del Multiusos. Algo que el ‘15’ alcarreño no olvidará. “Espero devolverle su apoyo con buen juego. Yo voy a darlo todo en cada minuto que juegue. En el gol, Rudovic estuvo generoso y me la pasó en un contraataque. No está mal para ser el primero, pero hay que mejorar mucho. Me quedo con las buenas sensaciones que me dio la rodilla”, apunta el hispano-serbio.

 

Dzokic espera seguir teniendo minutos en el próximo amistoso del Quabit BM, un triangular en Calatayud contra Ademar León y CAI Aragón. “Seguimos acoplándonos para afrontar en perfecto estado la vuelta a la competición contra Cuenca. Yo quiero luchar en cada entrenamiento por ganarme esos minutos en Asobal, aunque sé que es difícil porque el cambio de categoría –juvenil a senior– se nota al ser un deporte de contacto. Slava y yo lo notamos, pero sé que en cada minuto que tenga daré el cien por cien. Da igual en la demarcación que quiera ponerme Fernando”, destaca el joven lateral, que en el amistoso del pasado viernes jugó de extremo para dar descanso a Edu Reig. El hispano-serbio admite que los problemas en Alcobendas y Arrate pueden beneficiar al Quabit, pero no eso “no nos puede despistar. Tenemos que ir partido a partido y luchar por la permanencia. Toledo con tanto cambio es una incógnita. Nosotros tenemos que hacer nuestra temporada y no pensar en los rivales”, apunta y añade, pensando en el partido contra Puerto Sagunto, que “ganar ese choque sería un paso muy importante, no porque sea mi padre el entrenador. Cuando empieza el partido es un rival más”, concluye. En la actualidad del Quabit BM, Mateu Castellá evoluciona favorablemente de sus molestias en los abductores.