Paliza del Quabit BM al Adelma para ser el campeón del torneo

01/10/2010 - 09:45 Hemeroteca

Paliza del Quabit BM al Adelma para ser el campeón del torneo
Balonmano liga asobal
Los de Bolea ‘secaron’ el ataque cántabro en la segunda parte con un parcial de 7-21
El primer título de la pretemporada ya está en las vitrinas del Quabit BM Guadalajara. Los de Fernando concluyen el torneo Ciudad de Santander con una aplastante victoria ante los anfitriones por 19-32, que supera la renta que había conseguido el Arrate el pasado jueves.
adelma santander
quabit bm gu.

El Quabit BM Guadalajara necesitaba ganar de más de once goles para proclamarse campeón de la segunda edición del torneo Ciudad de Santander que se ha disputado en la capital cántabra desde el pasado jueves y lo hizo sin muchos apuros.
Los alcarreños batieron todos los registros venciendo al anfitrión con un aplastante 19-32, superando así la renta que tenía el Arrate, que vencía el pasado jueves al Adelma por 23-34. Ese resultado sumado al empate a 25 de alcarreños y vascos ha otorgado el título de campeón a los chicos de Bolea.
La progresión ascendente del equipo sigue siendo la nota predominante de la pretemporada del Quabit BM. Desde aquella derrota en Valladolid ante el Cuatro Rayas, el equipo ha ido cambiando y evolucionando. Su defensa está siendo cada vez más fuerte y el ataque certero, aunque aún queda mucho trabajo por hacer.

Otra remontada
El partido comenzaba con las fuerzas muy igualadas y quizá con el Quabit algo cansado después del importante esfuerzo del pasado viernes en el empate contra el Arrate. La diferencia de categoría entre uno y otro no quedó de manifiesto hasta que comenzó la segunda parte. Los de Bolea salieron bien asentados sobre la cancha, pero el Adelma no quería ceder tan pronto ante su afición y el constante intercambio de golpes hacía muy atractivo el duelo. Al término de los primeros 30 minutos, los santanderinos se imponían por la mínima (12-11). Las exclusiones en este primer periodo mermaron el potencial alcarreño.
En la reanudación, la historia cambió radicalmente y la defensa del Quabit BM asfixió el ataque local provocando numerosos robos de balón y contragolpes claros que finalizaba en gol un inspirado Coque Fontela. El extremo gallego volvió a ser uno de los destacados de su equipo.
La renta del Quabit BM empezaba a ser pasmosa y los ocho goles de diferencia obligaban al técnico local a pedir tiempo muerto para intentar frenar la sangría, pero la escabechina ya estaba hecha.

El 5-1 en defensa que puso Bolea sobre la cancha destrozó a los cántabros que no podían batir la portería alcarreña defendida por un soberbio Jorge Oliva.
El parcial final del partido demuestra por sí solo la efectividad de la defensa del Quabit BM que ‘secó’ a los de La Albericia en un aplastante 7-21, que a la postre le daría el título de campeón del Ciudad de Santander.

Adiós al “miedo escénico”
El segundo entrenador y ayudante de Bolea, Ike, comentaba al término del choque que “veo el progreso del equipo. Estamos asentando las bases de defender fuerte y correr. Encajamos pocos goles y las sensaciones son muy buenas. Tampoco haya que sacar muchas conclusiones de un partido así, pero quizá hayamos perdido el miedo escénico. La plantilla está entrenando mucho y bien y se está notando en cada partido. Los lanzadores están cogiendo confianza y hoy –ayer– Rudovic ha estado muy fino, poco a poco”.

Bolea confía en un siete inicial
de garantías y mucha experiencia

Bolea apostó en el siete inicial por un bloque compacto que está funcionando y que ya ha repetido en más de una ocasión a lo largo de la pretemporada. En portería, Jorge Gómez, aunque no jugó toda la primera parte ya que el técnico maño también dio minutos al canterano Lucas Montenegro, que en el tiempo que estuvo sobre la cancha demostró estar a la altura y además detuvo un siete metros. En la segunda, ya jugó Oliva. En los extremos, Coque y Edu Reig –dos fijos para Bolea–; en los laterales, Sergio Valles y Novica Rudovic; en el puesto de central Sergio de la Salud, que volvió a tirar de galones, y por último en el pivote el incombustible Andrés Epeldegui, que sigue siendo el líder del equipo dentro y fuera del vestuario.