
Primer revés para el Deportivo
25/08/2012 - 23:12
Experiencia o sensación de que lo que estamos diciendo o haciendo ya lo hemos dicho y hecho antes, en una época remota; de haber estado rodeados, hace tiempo, por las mismas caras, objetos y circunstancias. Así describe Dickens aquello del déjà vu. Algo similar ocurrió el sábado en el Pedro Escartín. El paso del Girona por el coso alcarreño fue poco menos que calcado al de principios de mayo cuando morados y rojiblancos se enfrentaron en Liga en la recta final de la temporada pasada. Mismo terreno de juego con renovadas dimensiones, mismos contendientes, idéntico brazo ejecutor (Jandro) y parecido resultado. Hace apenas cuatro meses, los gerundenses se marcharon de Guadalajara con cuatro goles (1-4) en su haber, el sábado el botín ascendió a cinco.
Paralelismos a un lado, esta vez el Deportivo intentó mandar desde el inicio. Llegó a adelantarse en el marcador pasado el primer cuarto de hora pero se vino abajo tras el descanso. Entre el final del primer tiempo y el principio del segundo recibió la friolera de cuatro goles que tiraron al traste con la ventaja adquirida en la primera mitad.
Pese a haber variado el 80 por ciento de la plantilla respecto a la temporada anterior fueron dos jugadores de la vieja guardia los encargados de cocinar el primer tanto de la temporada en el Pedro Escartín. Corría el minuto 19 y un preciso lanzamiento de esquina de Gerard Badía encontraba a Jony libre de marca en el segundo palo. Su inapelable testarazo daba la ventaja momentánea al cuadro de Terrazas. Cambian los cromos pero no la esencia. La estrategia continuará siendo un verdadero filón para los deportivistas en esta nueva era.
En el conjunto de Francesc Ferrer Rubi faltaba punch. Con las alas en barbecho por falta de balones y Jandro en la hora de la siesta, el Depor fue sobreviviendo sin apenas pasar apuros. Tan solo alguna acción esporádica de Jofre o Juanlu Hens por los costados sobresaltaba tímidamente a la zaga morada.
De todos modos, al Depor le faltaba engranar la maquinaria para terminar de explotar el fútbol que desea Terrazas. Susaeta estuvo algo perdido partiendo desde la mediapunta y encima tuvo que retirarse antes de tiempo por unas molestias. Kepa, fijó a los centrales pero poco más. Nunca recibió balones al piso y acabó desfondado dejando su sitio a Cristian. El caso es que fueron pasando los minutos. Los locales tenían la situación bien controlada sin embargo un golpe de suerte cambió el rumbo del partido. El lateral izquierdo visitante David García se asomó al ataque, buscó el disparo lejano y éste tropezó en Zazo desviando la trayectoria del balón. La pelota rozó el larguero con tan mala pata que acabó introduciéndose en la portería de Toño Ramírez. Era el minuto 37.
La cosa no quedó ahí. Tras el paso por los vestuarios, Jandro debió sentir morriña del descosido que había provocado cuatro meses atrás en el Escartín y decidió que era el momento de volver a echarse el equipo a la espalda. Cogió las riendas del duelo y el solito decidió con su excelsa visión de juego.
Quedó patente que los morados no aprendieron respecto a la última vez. Le dejaron campar a sus anchas entre el círculo central y la corona del área y desde ahí, comandó la victoria de su equipo, a la postre goleada en contra para los alcarreños.
César Soriano se descolocó un instante y ahí apareció Jandro sesgando la defensa y asistiendo magistralmente a Juanlu Hens que cruzaba el cuero ante la salida de Toño. Y dos minutos después, en otra jugada iniciada por el omnipresente Jandro, Benja volvía a perforar el marco deportivista convirtiendo el 1-3. Tras apenas cuatro minutos del segundo tiempo, se abría un panorama totalmente diferente y a la vez desalentador.
Álvaro Antón saltó al campo y dio algo de luz al Depor en la zona de tres cuartos pero fue un espejismo. ¿Adivinan quién anotaría la puntilla con el 1-4...? En efecto, Jandro. Recogió un rechace en el pico izquierdo del área, dejó sentado a Jony y lanzó una parábola mágica al palo largo. Imposible para el cancerbero local. Increíble pero cierto. En apenas 20 minutos (desde el 37 al 58), el Guadalajara se había desangrado.
Con el partido visto para sentencia, prácticamente lo que vino después fueron los minutos de la basura. Solo Aitor, que por cierto dio una auténtica lección de profesionalidad y defensa de unos colores, sacó fuerzas para seguir intentándolo a pesar del chaparrón. Su coraje e insistencia arrancó incluso los aplausos del público. Su compromiso enamorará al Escartín. Ya en la recta final, Azkorra pudo maquillar el resultado pero fue Eloy el que cerró el telón con una vaselina para enmarcar (1-5). Fue pura alevosía.
Pese al disgusto y la rotundidad del resultado aún es pronto para sacar conclusiones precipitadas porque no hace falta recordarlo, el objetivo es el play-off de ascenso.
CD GUADALAJARA: Toño Ramírez, Javi Barral, Espín, Kike Tortosa, César Soriano, Jony, Álvaro Zazo (Azkorra, min. 49), Gerard Badía, Aitor, Susaeta (Álvaro Antón, min. 44) y Kepa (Cristian, min. 67).
GIRONA: Mallo, José, David García, Chus Herrero, Tébar, Garmendia, Juanlu Hens, Jandro (Eloy, min. 86), Benja (Ion Vélez, min. 75), Migue y Jofre (Felipe, min. 45).
ÁRBITRO
David Pérez Pallas (Comité Gallego) auxiliado en las bandas por Enrique José Ramos Ferreiros y Roberto Vázquez Alvite. Amonestó a Javi Barral y Espín por el Guadalajara y a Chus Herrero y Tébar por el Girona.
GOLES
1-0. Min. 19: Jony.
1-1. Min. 37: David García.
1-2. Min. 47: Juanlu Hens.
1-3. Min. 49: Benja.
1-4. Min. 58: Jandro.
1-5. Min. 91: Eloy.
INCIDENCIAS
Estadio Pedro Escartín. 1.500 espectadores.
Segunda jornada de la Liga Adelante y primer partido en casa para el Club Deportivo Guadalajara.