Primera victoria fuera de casa de un Depor en estado de gracia

El Guadalajara ganó porque lo mereció en Murcia, con un buen planteamiento que ahogó a su rival que apenas tuvo ocasiones claras de gol. El mejor jugador alcarreño con diferencia fue Vicente que ayer firmó uno de esos encuentros en el que si Azkorra hubiera estado acertado, estaríamos hablando de un marcador de escándalo. A ello contribuyó la situación anímica de los pimentoneros, que no fue la más idónea después del trágico suceso solo dos horas antes que se llevó la vida del jardinero del club. Aún así, en La Condomina solo hubo un equipo que quiso ganar, y ése fue el Guadalajara, por lo que los tres puntos están conseguidos con toda justicia.

Con 22 minutos de retraso, dio inicio el encuentro que enfrentaba a dos equipos que comenzaron parecidos a como estaba el ambiente: desangelado y frío. Sin apenas triangulaciones, el Deportivo daba la cara y mantenía una línea férrea atrás y unas contras muy rápidas que avisaban una y otra vez al conjunto grana. Vicente podía siempre con un Mario Marin algo lento e impreciso. El equipo visitante conseguía con tan solo dos toques encarar a la zaga murciana que, por décimo octava vez tuvo que ser reconstruida. El peligro alcarreño era inminente. Tanto es así que la primera ocasión digna de mención la tendría Vicente en el 12 en un disparo ajustado al palo, pero que se iría fuera.

El Real Murcia intentaba sobreponerse y las acciones del argentino Nico Martínez alegraban a un público frío con el equipo y que ovacionaba al centrocampista sudamericano cuando después de irse de tres rivales no consigue elevar el balón ante la salida de Razak. Vicente era el mejor jugador de los visitantes en esta primera mitad y, en el minuto 19, estuvo a punto de conseguir gol en una jugada donde deja atrás a Mario Marín y dispara ajustado al palo largo, avisando aunque el balón se va por fuera. El conjunto grana comenzó a dominar y, sobre todo, a tener más la posesión, pero parecía una trampa diseñada por los morados, pues el equipo de Gustavo Siviero apenas tenía ocasiones dignas de mención, y el balón se perdía cuando se llegaba a la frontal de la meta defendía por Razak.

El tiempo pasaba y el juego no mejoraba pues los granas estaban atascados a partir de la línea de tres cuartos, el Guadalajara poniendo el pie para a la contra intentar matar el partido, y eso llevó el partido a una deriva donde el conjunto visitante pudo matar el partido, primero en el minuto 36 Azkorra recibió un centro desde la izquierda y remató ajustado al palo cuando parecía que el gol era inevitable. Cuatro minutos más tarde era Vicente el que hacía jugada por banda izquierda y daba el pase de la muerte a Azkorra que remataba a bocajarro desviando a córner Javi Jiménez. Inmediamente después, un balón que recuperaba en la frontal del área Cristian acababa con un disparo de éste que se estrellaba en el larguero. Eran los mejores minutos de los forasteros que se fueron al descanso habiendo merecido más. Quería el Real Murcia borrar la imagen tan tacaña e indolente del primer tiempo, y entró mucho más metido y sobre todo más contundente en la parte de atrás.

Por su parte, el patrón a seguir por parte del Guadalajara era el mismo, con Azkorra arriba luchando todos los balones y buscando segundas jugadas que les dieran ventaja, y aunque el control del juego era grana, ese dominio en el juego no se traducía en ocasiones claras de peligro. Muchos fuegos de artificio pero a la hora de llegar a la portería de Razak el conjunto pimentonero se perdía. El equipo alcarreño estaba cada vez más cómodo y con jugadores como Jony y Erice funcionando en la línea de medios, y un Vicente arriba que terminó desquiciando a un Mario Marín que no conseguía pararlo en ninguna acción. El extremo siempre terminaba sacando su centro y el destinatario era un Azkorra que igual que había estado trabajando todo el encuentro de forma encomiable, había estado desacertado en todos los remates.

En el minuto 65 pasaría lo mismo; con todo a su favor el delantero del Guadalajara enviaría fuera. Así las cosas, el Deportivo consiguió adelantarse en el tanteador cuando transcurría el minuto 71. Jugada por banda derecha con centro al área, allí la zaga del Murcia no despejaba y el balón le quedaba suelto a Gaffour que lo envíaba al fondo de la red. El zaguero seria protagonista dos minutos más tarde, en esta ocasión por dar una patada a Kike García a la altura del pecho que le valió la roja directa. El Real Murcia lo intentó pero mas con el corazón que la cabeza pero se topó enfrente a un conjunto que estaba convencido en estrenarse de una vez por todas lejos del Pedro Escartín.